El cine indio, Bollywood, está de moda y con proyección global, como se ha demostrado este fin de semana en Madrid. De la siempre exótica India procede Priyanka Chopra, protagonista de Quantico, serie de espionaje y acción que ha incorporado Cuatro a los lunes, sobre un grupo de jóvenes que se incorporan a la formación en la CIA. Priyanka fue Miss Mundo en el año 2000 y tras un profusa trayectoria en su país de origen era inevitable que Hollywood pusiera los ojos en ella. La actriz y modelo hindú atendió a este periódico para hablar de Quantico, que se estrenó en abierto la semana pasada con buenos índices de audiencia.

-¿Cómo podría presentarnos su personaje, Alex Parrish?

-Va a gustar en España. Lo que más me fascina de Alex es que va evolucionando con la serie. Es la quintaesencia de una chica moderna de hoy en día. Es inteligente, segura, elegante. Bonita. Sí, es casi perfecta, pero es difícil equilibrar todo eso. Parrish le pone un punto de sal a todo y lo que más me gusta es que porque es una agente del FBI, no tiene un lado masculino, sigue siendo muy femenina. Es el ying y el yan de lo que debe ser una mujer.

-Quantico comienza con una escena subida de tono ¿No teme que su estrellato sea más por su cuerpo que por su interpretación?

-Hay muchas cosas subidas de tono en muchas otras películas que he rodado, pero siempre he cuidado mucho la imagen. Quantico es una producción de la ABC, de Disney, y se piensa siempre en el gran público. En las escenas más delicadas no se ve mucho, se sugiere. Esta es una serie realizada con gusto.

-Usted ya era famosa en la India y en países como Sudáfrica ¿En qué circunstancias dio este paso para trabajar en Estados Unidos?

-Quería trabajar con Josh Safran y él quería contar conmigo. Me encanta otras de sus series como Mentes Criminales o Gossip Girl. Yo me dije, "ahí es donde quiero estar", y al cabo de los años lo conseguí. Quería probar en Hollywood con un productor ejecutivo con garantías.

-Paul Lee, el presidente de la ABC, habló mucho sobre este proyecto con usted que además ha renovado por una segunda temporada ¿Siente mucha presión por ser tan cuidada por su empresa?

-Pues qué le voy a decir, es una gran presión y me sentí muy feliz con la renovación. Yo estoy acostumbrada a trabajar con presión y con intensidad. Ya he hecho unas 40 películas. Cada día vivo la misma presión. La única diferencia la tengo cuando me levanto los sábados, los domingos. Siento mucha presión porque quiero ser tomada en serio por mi talento, puedo aportar un punto de vista fresco a mis papeles en América. El casting de Quantico es una apuesta por la diversidad y es un reparto global para una producción con proyección para todo el mundo.

-En las series estadounidenses se ha afianzado la diversidad étnica. Hay papeles principales para latinos, hindúes, afroamericanos...

-Por fin ¿verdad? En Anatomía de Grey, que es también de la ABC, se puede decir que comenzó a afianzar esa tendencia en Estados Unidos, para hablar de la diversidad desde una serie donde protagonistas de distintas razas tienen un peso similar sin renunciar a sus peculiaridades. Me cuentan que en Estados Unidos existe una tendencia en los productores de dar oportunidad a los mejores actores, sean de la raza que sean, aunque haya polémicas como la de los Oscar.

-Antes de sumarse a Quantico compartió una masterclass con uno de los grandes actores de moda en la televisión, Kevin Spacey, protagonista de House of cards ¿Cómo fue aquella experiencia?

--Esa clase fue en los Premios IIFA, los premios de la cinematografía hindú, hace unos tres años en Florida. Spacey ya estaba grabando House of cards. Yo representaba las películas hindúes y él las películas americanas. Las cosas que me dijo sobre la televisión me impulsaron a plantearme trabajar en este medio. Fue decisivo para que yo diera el salto a Estados Unidos.

-¿Siempre tuvo vocación por la interpretación? ¿O fue una opción que creció cuando fue elegida Miss Mundo?

-Tenía 17 años cuando empecé a actuar, poco antes de ser Miss India y Miss Mundo. Lo de la interpretación lo llevo en la sangre. No sé si sabría hacer otra cosa, pero siempre busco la excelencia en todo lo que hago.

-¿Cómo resume Quantico?

-Quantico es una serie ágil y creo que no insulta a la inteligencia. Odio cuando veo cosas en una serie de televisión que sabes que nunca pasarían en la vida real. Es un guión inteligente: aunque puedas creer después que sean cosas que no existen, las vives como si estuvieras viendo la realidad.