balance

La Semana Santa del calor y el centenario

  • Las 32 cofradías han podido realizar su salida, como ya ocurrió en 2015 tras 16 años con algún día de lluvia

Camareras en el interior del Sagrario.

Camareras en el interior del Sagrario. / carlos gil

La Semana Santa de 2017 ha resultado casi perfecta para el espectador y los cofrades, por aquello de no otorgarle la perfección absoluta con el fin de seguir mejorando. Un anhelo que llega en un año de centenario de la Semana Santa con el siglo de vida de la cofradía del Vía Crucis.

Y junto a lo cofrade, ha habido un protagonista, el tiempo. La semana se ha podido desarrollar de manera completa, con las 32 cofradías en las calles y con buen tiempo, de más si se era costalero, músico, nazareno o camarera, que han sufrido los efectos del calor y las temperaturas en sus estaciones de penitencia. Aunque no ha habido actuaciones de gravedad de los servicios sanitarios, salvo atenciones por desvanecimientos o golpes de calor.

Parecía por los comentarios en las calles que hacía mucho tiempo que no se daba este clima tan bueno en Semana Santa. Pero no hay que retrotraerse mucho para encontrarlo. Fue en 2015. Ese año sí fue histórico pues fue la primera completa tras 16 años, desde 1999. El resto todas había llovido algún día y en 2000 suspendieron al Nazareno.

Tras el pleno de cofradías en 2015, el 2016 sólo faltaron a su cita dos (la Borriquilla y las Maravillas por la inestabilidad de la jornada) y este año de nuevo se ha producido pleno.

Con el buen tiempo y todo en las calles, el seguimiento de público se ha mantenido. Aunque faltan aún los datos oficiales, a partir del miércoles se registraron los llenos previstos. Sólo queda la duda de si durante los primeros días había menos público en salidas y sobre todo regresos.

Para lo que también habrá que esperar a la estadística es para el incremento de hermanos en las filas de nazarenos o de camareras. Parece que sigue habiendo más mantillas en los cortejos, salvo contadas excepciones. Y que este año se podría haber dado un incremento en la participación.

En cuanto al discurrir de las hermandades, adelanto casi generalizado en la llegada a carrera oficial, por lo que se podrían mirar de nuevo los horarios; y una etapa de clasicismo en las hermandades, que apuestan ahora por las marchas clásicas y por un andar costalero sin concesiones, solo andando de frente.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios