El Granada Atlético va camino de jugar la fase de ascenso a Segunda División B por tercera temporada consecutiva. Ayer venció a un rival directo como es el Vélez, que a pesar de presentarse en Granada con la condición de segundo clasificado, causó una pobre impresión.

La suerte del partido pudo cambiar para el equipo veleño en el minuto 2, cuando Jesús estrelló en el poste un disparo desde fuera del área. Sin embargo ésta sería la jugada más peligrosa del Vélez en todo el encuentro. La primera parte del Atlético tampoco fue para enmarcar ni mucho menos. Tan sólo un disparo de Sergio Cruz a los 27 minutos confirmaba el aburrimiento general.

La acción clave del partido se produjo a los 40 minutos, cuando tras un duro encontronazo entre Igna y Benji se originaba una pequeña trifulca entre jugadores, donde destacó el empujón del veleño Jesules a un contrario. El árbitro no dudó en considerarlo como agresión y dejó al equipo visitante en inferioridad numérica.

El Atlético tuvo que ser ayudado por el Vélez para marcar el primer tanto. Damián, con un desafortunado despeje, marcaba en su propia portería, dejando el partido de cara a los intereses del cuadro local. Los jugadores de Miguel Novo jugaron más cómodos sobre el terreno de juego, mientras que el desgaste del Vélez se notó demasiado, hecho que aprovechó el equipo rojiverde para montar en los últimos minutos continuos contragolpes. Fruto de estas jugadas llegaron los goles que confirmaron la goleada. Primero fue Acosta, con un disparo cruzado, y Thierry igualaba el goal average particular entre ambos equipos tras un pase de Acosta.