No se escapa el Baza de sufrir los rigores de la crisis económica, y para aminorar esta incidencia ha propuesto un plan de choque en busca de recursos atípicos. El plan fue presentado por el gerente, José Miguel Bosca, y por los directivos Mariano Segura y Blas Hernández. Antes expusieron que el motivo principal de esta campaña es debido principalmente a que la captación de socios y de abonados ha descendido considerablemente con relación a la temporada anterior, sin duda "motivada por el descenso de categoría", apuntó Bosca, ya que de los 1.019 abonados anteriores se han conseguido 617 en la actual, y de más de 300 socios han quedado sólo 174.

La campaña económica va a consistir en la visita, por parte de los miembros de la directiva, a todos y cada uno de los establecimientos, negocios y empresas de la ciudad, con el fin de solicitar una ayuda directa de 50 o 100 euros. A cambio, el club, les hará poseedores a los colaboradores de unos carteles de color azul o dorado. Además anunciaron que el patrocinador está prácticamente renovado para esta temporada, y que la colaboración por este concepto es de 150.000 euros; al igual que la subvención municipal asciende a 40.000.