El presidente del Club Baloncesto Granada, José Julián Romero, aprovechó el tradicional almuerzo con los patrocinadores de la entidad para volver a infundir ánimo y tranquilidad a los jugadores del equipo ACB ante el comprometido enfrentamiento que tienen ante el Cajasol el domingo, en el que se juegan evitar sufrir más ante la amenaza del descenso de categoría. Recordó que el conjunto nazarí tiene "un colchón de dos victorias sobre el Estudiantes", que es el penúltimo en la tabla de clasificación a falta de cuatro jornadas para la conclusión de la competición, por lo que estimó que "dependemos de nosotros", a lo que agregó que "los próximos partidos serán fundamentales para conseguir la permanencia", en el intento de mentalizar a todos de que en Sevilla no se acaba la Liga.

El mandatario tampoco perdió la ocasión para afirmar ante los comensales que el club "está más vivo que nunca" y calificarlo como "el proyecto deportivo más solvente de Granada". De igual modo, subrayó que la entidad tiene proyección de futuro "gracias al tejido empresarial granadino", del que puntualizó que "con su esfuerzo y fidelidad ha hecho posible este sueño, que una ciudad como Granada esté en la mejor liga de Europa".

Julián no quiso finalizar su alocución sin hacer referencia a la ampliación de capital puesta en marcha en el CB Granada: "Llegará a todos los que queramos de nosotros y así os podéis sentir todavía más dueños del club". Y cerró su discurso reclamando un aplauso para los integrantes del equipo y para todos los empleados de la entidad.

En la comida destacó sobremanera la presencia del alcalde de Granada, José Torres Hurtado, que quiso corresponder a las palabras ofrecidas por José Julián Romero al exponer: "Sois el único equipo que nos representa a nivel nacional y que lleva el nombre de Granada por toda España y, por tanto, hay que hacer todo lo posible para que se mantenga donde está. Tengo la certeza de que el año que viene vamos a seguir en la Liga ACB".

El almuerzo de patrocinadores del CB Granada, que ha cumplido su quinta edición, se celebró en el restaurante Camaura y contó con la asistencia de 260 personas, entre los que figuraban los integrantes de la plantilla del equipo que compite en la Liga ACB.