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Garzón confía en sus pupilos

  • "Con Amezcua y María Pérez cualquer cosa es posible", dice el técnico

Jacinto Garzón, rodeado de los mundialistas Alberto Amezcua y María Pérez.

Jacinto Garzón, rodeado de los mundialistas Alberto Amezcua y María Pérez. / peter powell / efe

Quien que conoce a Jacinto Garzón sabe que es trabajo puro, constancia, lucha, esfuerzo, pasión por lo que hace y sacar tiempo de donde no lo hay. A sus 35 años, este licenciado en Actividad Física y del Deporte, ejerce como maestro y tiene como pasión la marcha atlética. Ahí están los éxitos con marchadores como José Manuel Pérez Rubio, María Pérez, Alberto Amezcua… y toda la cuna de jóvenes valores que vienen trabajando en la escuela de la Juventud Atlética Guadix. Garzón fue marchador profesional en sus inicios y hoy día es entrenador de la selección española.

Su reto más inmediato está a la vuelta de la esquina, con la participación de sus pupilos Alberto Amezcua y María Pérez en la prueba de marcha en los Mundiales de atletismo que se están celebrando en Londres. Sobre sus posibilidades pasado mañana domingo, el entrenador lo tiene claro: "Sé de la capacidad que tienen mis atletas, sé que son capaces de hacer lo mejor e, incluso, de sorprenderme, porque atletas con tanto talento tienen esas cualidades. A mí me gusta siempre marcarme unos objetivos como muy asequibles y, a partir de ahí, que venga lo que tenga que venir". Según Garzón, su modus operandi es éste para que sus atletas "trabajen con menos presión, aunque ellos se exigen al máximo y sé que si pueden ganar el oro van a ir a por él".

Sobre la evolución de Amezcua y María Pérez, el entrenador señala que en la actualidad el marchador "está cerca de su etapa de máxima maduración para afrontar unos años muy buenos". De su pupila, Garzón subraya que "está empezando prácticamente, lleva dos años en el 20 kilómetros, por lo que su margen de progresión es muy alto". Bajo estas premisas, el técnico considera que en Londres un buen resultado para ambos estaría en estar "entre los doce o quince primeros", si bien aclara que Amezcua podría "hacer realidad el sueño de estar entre los ocho primeros".

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