Pese a las numerosas bajas, sobre todo en defensa, y la racha negativa de resultados cosechados en las últimas semanas, el Granada B hizo en la mañana de ayer lo que casi nadie había conseguido hasta el momento, derrotar al todopoderoso Carboneras en su casa.

Los pupilos de Fernando Estévez, que llegaron a tierras almerienses con muchas dudas sobre el funcionamiento de la defensa, de la que únicamente sobrevive a las lesiones y sanciones Che, realizó un partido muy serio pese a que a los 32 minutos de juego fue el líder el que se adelantó por medio de Juanlu con un libre directo. Pero lo mejor de los rojiblancos estaría por llegar ya que tras el descanso, apareció la figura de Joaquín, autor de los dos tantos visitantes. El primero a pase de Morales y el segundo con un buen disparo que permitió a su equipo traerse los tres puntos.