La comparecencia de prensa de Fabri González fue escueta y algo caótica, no por culpa del entrenador gallego, sino por la desorganización exhibida por el gabinete de prensa vigués y el gallinero en el que se convirtió la sala de comparecencias, donde apenas se pudo escuchar las palabras del técnico. Fabri consideró injusta la derrota del equipo, al que felicitó por el derroche de facultades y por su actitud sobre el campo. Se mostró convencido de que en Granada se puede remontar la eliminatoria, aunque para ello cree fundamental hacer "una caldera" de Los Cármenes .

"Felicito a mis jugadores porque se dejaron la piel en el campo, lo dieron todo y se merecían otro resultado, el sabor que me deja el partido es amargo por eso", explicó el entrenador rojiblanco. Según Fabri, "antes del partido ya comentamos que cualquier mínimo detalle podía decidir el partido y la eliminatoria". Y es que cree el lucense que "cuando mejor estaba jugando el Granada llegó el gol de ellos y se nos queda un sabor amargo por eso, merecimos como mínimo el empate, porque tuvimos tantas o más ocasiones que el Celta".

A juicio del técnico, pese al triunfo parcial de los vigueses la eliminatoria sigue "al cincuenta por ciento, creo que en Los Cármenes podemos remontar y lo vamos a conseguir". No dejó pasar el técnico la oportunidad de criticar al árbitro por la acción del golpe a Roberto, que derivó en tarjeta amarilla para Iago Aspas: "No me gustó el pequeño detalle del arbitro, pues Roberto sale con la cara como un pan, la amarilla se queda corta porque es una patada en la cara, imagínense que se le cierra el ojo, como de hecho lo tiene, y no puede jugar el sábado".

Fabri reiteró en varias ocasiones que "la eliminatoria dura 180 minutos, en los primeros 90 el equipo estuvo muy correcto y estamos completamente capacitados para remontar en Granada, vamos a hacer una olla a presión en Los Cármenes y lo vamos a superar, estoy convencido de ello".

Cuestionado por la posible participación de Álex Geijo en el partido del próximo sábado en Los Cármenes, se mostró contundente y quizá jugó al despiste cuando afirmó que "se lo tenemos que preguntar al médico, no sabría contestar sobre si podrá estar o no".

Se lamentó el entrenador del cuadro granadino de que el gol que desniveló la balanza llegó "fruto de una acción llena de rebotes en el área, así pudo terminar también alguna jugada nuestra". Y es que se reafirma la teoría de Fabri sobre la posesión y el juego de ataque y defensa en relación con los goles: "Estoy cansado de decir que el fútbol es así, que los goles llegan muchas veces en acciones así, o en jugadas con posesiones cortas". Y, todo, quiso dejar claro que "sin desmerecer al Celta, que es un gran equipo con un gran entrenador".

Por último, el técnico se reiteró en el mensaje a la afición de cara al sábado: "Hay que llenar Los Cármenes, tiene que ser una caldera, una olla a presión, tenemos que sacar el partido adelante de la mejor manera posible y con ayuda de todos".