Los deportistas profesionales le temen a la palabra fracaso como a una vara verde. Se considera por lo general que cuando uno lo da todo, y no consigue su objetivo, nunca puede fracasar, y en cierto modo es así, aunque quizá habría que buscar otro término para diferenciar uno y otro fracasos. El Granada CF ha vuelto a estrellarse en la odiosa competición de la que no logra salir desde el siglo pasado, la Segunda B. Es más, su último objetivo es intentar acabar ¡entre los 10 primeros! Por desgracia, estamos más que acostumbrados a dejar de ver jugar al equipo rojiblanco a mediados de mayo. Fracaso, sí, con mayúsculas, teniendo en cuenta que se va a meter en la cuarta plaza el Marbella, o el Puertollano, quizá el Melilla, y que ninguno de ellos tienen ni más presupuesto ni mejor equipo, ni más potencial que el nuestro. El epílogo, sin motivación, se escribirá esta tarde en el José del Cuvillo portuense, ante un conjunto ya descendido y que decidió adelantar el choque al viernes con el consentimiento de los rojiblancos. Allí se acabará de echar el borrón, y en cuanto pite el colegiado el final comenzará la cuenta nueva.

Braojos se llevará a los únicos 16 futbolistas de los que dispone en el que muy posiblemente sea su último partido como capitán del barco. El toledano sustituyó a Óscar Cano con la intención de enderezar el rumbo, pero no lo ha conseguido. Los problemas económicos, la descompensación del equipo, la lesión de Óscar Martínez, la irregularidad, en una palabra, del Granada CF durante el campeonato han impedido llegar al tramo final con opciones de alcanzar siquiera la cuarta plaza. Cuando se tuvo cerca, se falló, y los últimos dos meses han sobrado prácticamente enteros.

La alineación que disponga esta tarde es una incógnita, aunque puede barruntarse que hará algunos cambios. Por ejemplo, puede volver a la portería José Antonio, y también Suárez, que dejó de aparecer por las alineaciones hace algunas semanas. Cervera quizá tenga hoy la oportunidad que Braojos le ha negado semana tras semana, y puede que hasta Fonseca sea titular. Es lo de menos. Todos aspiran únicamente a que esto se acabe cuanto antes.