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Ulloa otorga un triunfo estéril al Almería

  • Los de Esteban Vigo se quedan fuera de la fase de ascenso

Un gol del argentino Ulloa, su vigésimo octavo tanto (pichichi de la categoría), dio al Almería un triunfo (1-0) estéril ya que no le sirvió para clasificarse para el play off de ascenso, ante un Alcoyano que llegó al choque con la categoría perdida.

Ganó el que más se jugaba y ese fue el equipo almeriense, que dispuso de muchas ocasiones para haber vencido con más comodidad, pero también pudo escapársele la victoria porque el Alcoyano, sobre todo en la recta final de la segunda parte, dispuso de alguna oportunidad aislada que no llegó a fructificar aunque sí metió el miedo en el conjunto de Esteban Vigo.

La tensión local se dejó notar tanto en el fallo como en el acierto. En el minuto 8 llegó la primera ocasión, tras una falta botada por Corona que tocó de cabeza Soriano, pero Jakobsen no llegó a rematar. La siguiente clara fue la del gol. Superado el cuarto de hora, Soriano peinó un saque de banda de Juanma Ortiz y Ulloa, de espaldas a portería, controló primero para rematar después haciendo el que sería gol del triunfo.

A partir de ahí, remar y remar para llegar a la orilla, pero más pendiente de lo que sucedía fuera que de lo que pasaba en el Juegos del Mediterráneo. El Alcoyano, mientras, comenzó a empujar. Su primer aviso llegó como consecuencia de un centro de Devesa que se fue a córner. Cañadas botó el saque de esquina y David Torres casi mandó el balón al fondo de la portería, pero Ulloa, atento, lo impidió. En la recta final de la primera parte pudo marcar el Almería, pero el delantero argentino remató mal tras una buena acción de Aleix Vidal.

La segunda parte sobró. En el arranque el conjunto local quiso aumentar las diferencias. Los almerienses dispusieron de una doble ocasión cuando Corona colgó una falta al área y Ulloa conectó un cabezazo que estrelló el esférico en el larguero. El balón le cayó a Carlos García y el disparo del central lo tocó Dorronsoro, casi sobre la misma línea de gol, para evitar el segundo. El partido fue decayendo hasta que despertó en la recta final cuando Cañadas, en el 84, trató de sorprender a Esteban, pero éste, con una gran estirada, evitó el tanto del empate.

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