Traspié para el equipo de balonmano del Club Deportivo Universidad de Granada. Pese a dominar el partido y el marcador durante buena parte del encuentro, su rival de ayer, el Granollers, pudo amordazar el ataque universitario para dar la vuelta al encuentro y dar más emoción aún a la primera ronda de la fase de ascenso a División de Honor B.

El equipo entrenado por Toni Pozo salió muy serio al parqué del pabellón de Astillero. Motivados por la victoria del día anterior ante el Adelma Sinfín -anfitrión de la fase-, los granadinos realizaron un partido muy completo, sobre todo en defensa.

La efectividad de Ricardo Amérigo bajo los palos permitió al Universidad aumentar poco a poco las diferencias en el electrónico hasta llegar a un esperanzador 15-11 poco después de la reanudación. Fue entonces cuando el cuadro catalán decidió dar un vuelco radical a su planteamiento defensivo.

Las modificaciones del Granollers ahogaron el trabajo ofensivo de los jugadores de Toni Pozo, que apenas dispusieron de ocasiones de peligro que permitieran mantener su ventaja. A la falta de mordiente se unieron las imprecisiones en el juego y el cansancio acumulado por los jugadores universitarios, que esta misma semana han disputado el Campeonato de España Universitario.

Primero llegó la paridad al marcador de La Cantábrica, y en los últimos quince minutos se materializó el vuelco que, finalmente, daría la victoria al equipo de Granollers por apenas un gol de diferencia.