Miguel Puertas afronta desde mañana su primera incursión en el Rally Centroeuropeo, una competición que surgió tras la cancelación el pasado mes de enero del Dakar y en la que el granadino confía en quedar entre los mejores pilotos privados pese a que, a priori, las características de la prueba -que se desarrollará entre Hungría y Rumanía- no le benefician precisamente.

"Da lo mismo correr aquí o allí, lo que importa es que sea duro física y psicológicamente, que se llegue al límite", reseña el granadino, que viajó a Budapest -ciudad que acogerá mañana la salida y en la que hoy se han realizado las verificaciones técnicas- el pasado jueves de madrugada. "Las etapas serán más cortas, no hay tanta navegación como en el Dakar, y las especiales beneficiarán a los rápidos", analiza Puertas, que confía en "tener la oportunidad de medirnos" con los mejores y preparar a fondo su participación en el rally de Argentina y Chile de 2009.

Las condiciones que van a encontrar el granadino y su equipo en tierras centroeuropeas son notablemente diferentes a las que han vivido durante los último cinco años en el Dakar. Por ejemplo, la organización advirtió ayer a través de su página web de que el recorrido de las etapas que discurren por la región rumana de Sovata han sido modificadas a causa de la nieve.

"Las circunstancias han variado, al ser Europa no hay tantas dificultades como en África, puedes descansar más, puedes comprar piezas... el aspecto logístico no será tan importante", explica Puertas, que a lo largo de esta semana llevará el dorsal 26 en su KTM.

En este sentido, el piloto granadino confía en que sea la organización la que aporte la dureza que ha hecho mítico al Dakar. "No tengo ninguna referencia, no es un Dakar, donde conozco el nivel que tengo", reseña Puertas. "Al no haber navegación no puedo aprovechar ese punto fuerte, que tengo, así que tengo que ser más rápido y para eso he entrenado", apostilla. Con estos argumentos, el piloto subraya que el objetivo es "estar lo más adelante posible".

La suspensión por amenaza terrorista de la pasada edición del Dakar horas antes de que comenzará dejó a Miguel Puertas sin poder afrontar la que hubiera sido su quinta edición consecutiva. De las cuatro anteriores, destaca el hecho de haber llegado al lago Rosa en las tres últimas ediciones disputadas. La suspensión en enero supuso un duro varapalo deportivo para el piloto, que destaca que "al no correr el Dakar no he podido cumplir con los compromisos que tenía con mis patrocinadores, aunque el gasto, tanto si corres como si no, es prácticamente el mismo".