Granada B y Guadix se repartieron los puntos en un partido muy igualado que hizo justicia a los méritos de uno y otro conjunto a tenor de lo visto sobre el terreno de juego.

Con la confianza de la victoria el pasado domingo en Carboneras, el filial rojiblanco comenzó el encuentro mandando sobre el verde artificial del Campo de la Federación. Sin embargo, dicho dominio no se tradujo en ocasiones claras de gol pues en los primeros 20 minutos, tanto José Luis como Víctor fueron meros espectadores.

El Guadix comenzó a despertar, pero la igualdad en el marcador se rompió con un golazo, uno más, de Álex García, que con un sutil toque con su pierna derecha, quitó las telarañas de la escuadra de Víctor. El tanto le otorgó confianza al conjunto rojiblanco pero una vez más la mala suerte se alió con los cachorros rojiblancos.

A cuatro minutos del final, una cesión de Che de cabeza a José Luis casi termina en gol. Fue un anticipo de lo que ocurriría dos minutos después tras un centro de Toni, pero esta vez con un resultado mucho más negativo para los de Fernando Estévez, que vio como Che alojó el cuero en su portería igualando sin querer el choque. Quizá demasiado premio para lo realizado por los accitanos.

Tras el paso por los vestuarios, la igualdad fue la tónica general. El Granada B, con jugadas a balón parado botadas por Álex García, quería crear peligro pero en este segundo acto, el Guadix si fue mucho más ambicioso. La lesión de Pedro Julián, que estaba realizando una gran labor en el centro del campo, la acusó el filial que vio como poco a poco el equipo de Rafa Medina se fue haciendo con el control del choque pero sin crear grandes ocasiones. Un centro de Santi sin remate y un saque de banda de Yeyo al que no llegó el propio Santi fue encerrando al cuadro local en su parcela.

En la recta final, los locales se lanzaron en busca de la victoria pero ya no habría tiempo.