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La pacificación de La Roja

  • Los internacionales de Barcelona y Real Madrid pasan página tras todo lo que sucedió en los clásicos

La selección española celebró ayer el día del "reencuentro", la primera convocatoria desde el aluvión de clásicos que dejó una cuenta pendiente: la pacificación de un vestuario con fisuras.

España inició la convivencia para preparar las dos últimas citas de la temporada, con los partidos amistosos en Estados Unidos (4 de junio) y Venezuela (7 de junio), por los que la Real Federación Española de Fútbol ingresará cuatro millones de euros. Es una de las ventajas que tiene ser campeón del mundo.

No fue un día cualquiera para Vicente del Bosque, el seleccionador español, la de convencer a los jugadores de Real Madrid y Barcelona de que la selección está por encima de cualquier problema personal que pueda existir. El aluvión de clásicos vivido hace un mes dejó heridas, con muchos jugadores con cosas de qué hablar en la intimidad: Iker Casillas, Sergio Ramos, Arbeloa, Víctor Valdés, Piqué, Busquets, Villa... Y ayer fue el primer día para conversar sobre los daños sufridos.

"Se ha hablado demasiado del pique, pero hay que pasar página. Nos miraremos a la cara, nos acordaremos y ahí quedará todo", aseguró Casillas, capitán de la selección y del Real Madrid. Sergio Ramos también abogó por la cordura. "Va a ser un reencuentro natural, como lo ha sido siempre. No va a haber ningún tipo de problemas. Las cosas están bastante claras. Fueron roces y rivalidad dentro del campo, pero aquí hay un bien común y colectivo", afirmó el defensa del conjunto blanco.

Todos los jugadores del Barcelona llegaron a Madrid con retraso por problemas con los vuelos, salvo Villa, que se encontraba en la capital de España rodando un anuncio publicitario. El primer internacional en llegar fue el jugador del Athletic Iraola, seguido de Capdevila y Silva.

Todos los jugadores que vieron por televisión los clásicos se mostraron firmemente convencidos de que las heridas surgidas ya están cicatrizadas, asegurando que el ambiente será el mismo que les llevó a ganar el último Mundial y la última Eurocopa. "Se arregla todo en un minuto, todo está olvidado después de cada uno luchase por sus intereses", afirmó Capdevila.

"No tengo que mediar porque no hay ningún problema", añadió Pepe Reina. Por otra parte, Fernando Llorente resumió lo que significa estar con la selección: "Es lo más grande que hay. Siempre que venimos lo hacemos contentos y con muchas ganas de hacerlo bien".

Las caras más felices fueron las de Bruno, Valero y Negredo, quienes regresaron a la selección, junto a la de Manu del Moral, quien disfrutó de su primera convocatoria. Ahora corresponde a Del Bosque detectar si los rencores siguen existiendo y cortar de raíz cualquier brote que pudiera manchar las relaciones de un vestuario que en otro tiempo fue idílico. Atrás deben quedar ya los tristes episodios acaecidos durante los cuatro encuentros disputados entre el Barça y el Madrid en la Liga de Campeones, Liga y Copa del Rey.

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