El Granada CF confía en ofrecer a sus seguidores la tercera victoria consecutiva para seguir contando con opciones de disputar la fase de ascenso. Óscar Cano piensa que el desplazamiento masivo de aficionados va a suponer "un estímulo importante para ganar". No cree que se convierta en un elemento de mayor presión, más bien estima que "es positivo que vayan muchos, porque estarán allí para animarnos. Ya después dependerá de las sensaciones que nosotros seamos capaces de transmitirles con el juego".

El hecho de que la plantilla haya cobrado una de las tres nóminas pendientes ha tranquilizado el ambiente a juicio del entrenador rojiblanco. "Ha servido para que no se hable de otra cosa que no sea el fútbol y eso siempre es bueno", sostiene. Los que no han cobrado son los miembros del cuerpo técnico, aunque Cano no quiere levantar la voz y prefiere "elegir otro vehículo para reivindicarme. Si estoy contento o descontento se lo digo a la cara a quien le corresponda, no a través de los medios".

Un aspecto que le preocupa de cara al encuentro de este domingo es que el Marbella pueda adelantarse en el marcador, ya que "sería más difícil después, porque son muy sólidos en defensa desde que Oli está en el banquillo". Considera que el rival va a ser "peligroso en la estrategia. Debemos de tener cuidado. Su juego gira en torno a la capacidad de Cort arriba. Por arriba pueden hacer daño en cualquier momento".

En las últimas jornadas el equipo ha mejorado su rendimiento en ataque. Óscar Cano espera que se continúe en esa línea: "Hemos dado una vuelta más de tuerca y estamos demostrando que buscamos con insistencia la portería contraria. A veces jugamos hasta con tres puntas".

La única duda es la de Milla. El lateral alboloteño está con molestias en una rodilla y Carlos Ruiz se presenta como alternativa para sustituirlo en caso de que no esté al cien por cien.