La Consejería de Turismo, Comercio y Deporte de la Junta y la Asociación de Palacios de Congresos y Ferias de Andalucía (Afcan han establecido una comisión de trabajo en la que analizarán de manera conjunta la estrategia y las actuaciones a desarrollar en el sector de reuniones, con el objetivo de impulsar la comercialización y competitividad de este segmento turístico en la comunidad.

En este marco, en el que ya se han mantenido los primeros encuentros, se han creado tres comités técnicos centrados en las áreas de actividad de congresos, ferias y redes de comunicación 2.0, en los que se tratará de optimizar los recursos y esfuerzos que se realizan en esta materia, según informó ayer la Junta.

De este modo, se canalizará la experiencia y conocimiento de los profesionales expertos en cada área participantes en los diferentes comités y se llevará a cabo un diagnóstico "certero" sobre la situación actual de cada uno de los subsegmentos que componen esta oferta.

También se señalarán los objetivos específicos a conseguir en el marco de la promoción y la comercialización de ferias y congresos en Andalucía, se facilitarán las herramientas y acciones concretas a ejecutar y se intensificará el contacto con el tejido empresarial y el resto de organizaciones vinculadas a la actividad.

El turismo de reuniones y congresos es un segmento de "elevado interés estratégico" para la región, ya que, entre otros aspectos, cuenta con un efecto desestacionalizador de la actividad turística y el cliente al que se dirige dispone de una capacidad de gasto superior a la media de visitantes del destino.

Según las estimaciones de la Consejería, Andalucía recibe anualmente cerca de 1,4 millones de turistas de reuniones y congresos, que generan en torno a 680 millones de euros en ingresos, importe que supera los 730 millones sumando los gastos generados por sus acompañantes.

Se trata por tanto del segmento que realiza un mayor gasto medio diario, alrededor de 180 euros, muy superior al realizado por la media del total de turistas que recibe el destino, que se sitúa en torno a 60 euros.

En cuanto al perfil del cliente, destacan los viajeros nacionales y pertenecientes a los sectores médico-sanitario, administración pública y educación-cultura. Se suelen alojar en hoteles, especialmente de cuatro estrellas, y realizan actividades relacionadas con el turismo cultural, las compras y la gastronomía.