La compañía automovilística General Motors (GM) informó ayer a la Comisión del Mercado de Valores (SEC) de Estados Unidos de que "un comité no oficial" de acreedores ha aceptado una nueva propuesta del Departamento del Tesoro para canjear deuda por acciones. La propuesta anterior, que consistía en el canje de 27.200 millones de dólares de deuda por el 10% de las acciones de la nueva compañía resultante, fue rechazada, lo que abocaba a General Motors a la quiebra.

En el nuevo documento presentado a la SEC, GM señala que el Departamento del Tesoro ofrece a los acreedores un 10% de la nueva GM, con la garantía de alcanzar "un conjunto del 15 por ciento". Esta oferta depende de que suficientes acreedores proporcionen, antes del 30 de mayo, "declaraciones de apoyo" en las que indiquen que no se opondrán a la venta de activos de la antigua GM a la nueva empresa. El capital social de la nueva GM quedaría repartido inicialmente entre el Departamento del Tesoro con un 72,5%, el sindicato United Auto Workers (UAW con un 17,5% y los acreedores con un 10%.

Por su parte, la Comisión Europea pidió ayer a los gobiernos de Alemania y Reino Unido que se atengan a la normativa comunitaria con los planes de rescate de las automotrices Opel y Vauxhall ante la posible insolvencia de su matriz estadounidense, General Motors (GM). Para los inversores "no puede haber condiciones discriminatorias" de modo que en un país no puedan cerrar fábricas y en otro sí, advirtió un portavoz de la comisaria de Competencia del bloque, Neelie Kroes. Hoy mismo se reunirán los ministros de Economía de los países afectados en la Unión Europea. En España pueden ver peligrar su puesto los 7.500 empleados de la planta que General Motors (GM) tiene en Figueruelas (Zaragoza), donde se fabrican automóviles de Opel, por la que Fiat ha lanzado una oferta.

Por otro lado, Euroda, asociación que integra a más de 4.000 concesionarios europeos de Opel, anunció que mantiene su oferta de aportar hasta 500 millones de euros para adquirir una participación en la firma, después de que GM indicara que una necesidad de financiación adicional de 300 millones.