España

Hallan en Getxo un barril de cerveza cargado con 30 kilos de explosivos

  • El barril-bomba estaba listo para ser detonado y solo necesitaba instalarle un dispositivo iniciador para que pudiera estallar.

ETA intenta por todos los medios hacerse notar durante la campaña y precampaña electoral y un barril de cerveza cargado con unos 30 kilos de explosivos era lo próximo que la banda terrorista quería hacer saltar por los aires para dejar su impronta antes de la cita del 9-M. La Ertzaintza encontró en la localidad de Getxo (Vizcaya) este barril lleno de material explosivo, amonal o amosal, que podría formar parte de una entrega del aparato de logística de ETA, que provee de material a sus comandos, con el objetivo de cometer un atentado de forma inminente. El barril-bomba solo necesitaba instalarle un dispositivo iniciador para que pudiera estallar.

  El mismo día en el que el terrorismo volvió a colocarse a la cabeza en la lista de problemas que más preocupan a los españoles, un barril cargado con 30 kilos de amonal encontrado en un camino vecinal se encargó de demostrar que esta preocupación no es baladí. Fue en la localidad vizcaína de Getxo donde este mediodía agentes de la Ertzaintza encontraron el barril en un camino vecinal. 

  Un vecino de la localidad fue el que alertó a los agentes y, después de varias horas realizando labores de desactivación, para comprobar si se trataba de una bomba, una trampa o de un mero depósito de explosivos, los artificieros de la Policía autónoma vasca comprobaron que el barril metálico contenía unos 30 kilos de material explosivo, posiblemente amonal o amosal, y cordón detonante, aunque no había ningún detonador conectado. 

  Los primeros indicios que maneja la Ertzaintza apuntan a que se trataría de una entrega de material entre miembros de ETA, posiblemente con la intención de utilizar el recipiente como un artefacto explosivo para cometer un atentado. De hecho, solo faltaba colocar el dispositivo detonante para hacerlo estallar, dispositivo que podría consistir en un temporizador, con lo que podrían programar la carga para una hora determinada y avisar antes de su explosión, o un receptor, lo que supondría implicaría que el barril-bomba iba a ser detonado a distancia y podría ir dirigido contra un objetivo concreto.

  Aunque todo hace pensar en una entrega, tampoco se descarta que  el barril-bomba fuera colocado en el camino vecinal del barrio de Andra Mari, una zona residencial en la que viven muchos empresarios, para ser detonada allí. El recipiente elegido por los terroristas, un barril de cerveza, podría haber sido elegido para ayudar a disimular la bomba.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios