El líder del PSOE, Pedro Sánchez, ha reclamado este lunes a Mariano Rajoy que confirme que va a presentarse a la investidura en la primera semana de agosto y que para intentar lograr una mayoría opte por un gobierno "no continuista" y que aplique políticas distintas a las de los últimos cuatro años. 

Sánchez ha "dado por bueno" que Rajoy cumplirá su compromiso de someterse a la investidura entre el 2 y el 5 de agosto, pero le ha reiterado el voto en contra del PSOE. "Como hemos dicho sí al cambio, nuestro voto será contrario a Rajoy", ha vuelto a prometer el líder socialista durante su intervención en la reunión del grupo socialista celebrada en el Congreso en víspera de la sesión constitutiva de la Cámara baja. 

Para poder gobernar con estabilidad, Sánchez ha asegurado que el presidente del Gobierno en funciones tiene "el deber y la responsabilidad" de buscar apoyos en sus "aliados potenciales", entre los que ha insistido que no está el PSOE ni para apoyar su reelección, ni el gobierno. Ha vuelto a advertir de que no negociará con el PP el documento que remitió a los grupos la semana pasada, si bien ha tendido la mano a Rajoy para dialogar sobre "las cuestiones que considere". 

Además de no rehuir la investidura como en enero, el secretario general del PSOE ha puesto otras dos condiciones a Rajoy para que intente ser reelegido. Sánchez ha subrayado que al líder del PP le corresponde hacer "un gobierno conservador, pero de corte no continuista" y cuyo programa incluya "muchas medidas de cambio" respecto a las desarrolladas desde 2011. 

A su juicio, el cambio pasa por "el empleo y no por la reforma laboral, por la regeneración y no por los casos de corrupción y por el Estado del bienestar y no por los recortes". Para Sánchez, el 26-J dejó la certeza de que el PP ganó las elecciones, pero que la mayoría fue la de aquellos partidos que defienden un cambio de políticas. "Está en la capacidad de Rajoy distinguir e interpretar el grado de cambio que necesita hacer para configurar esa mayoría parlamentaria para gobernar", ha enfatizado. 

El mensaje del líder socialista ha ido en la misma línea que el de Ciudadanos, Albert Rivera, quien ha avisado al PP que no apoyará ningún gobierno que no apueste por la regeneración y que no participará "activamente" de ningún proyecto que no dé este giro. Mientras que se resuelve la incógnita del gobierno, Sánchez ha remarcado que el PSOE está dispuesto a hacer una oposición "en favor del interés general, constructiva y útil". 

En la reunión a puerta cerrada con los diputados y senadores socialistas, el diputado guipuzcoano Odón Elorza ha pedido a Sánchez que no renuncie a intentar la investidura y buque un pacto con otras fuerzas de izquierda para formar un gobierno alternativo, como plantea Podemos. Sánchez le ha respondido que se encontraba ante una "paradoja", puesto que el pasado mes de marzo, él pudo constatar que "había tenido más difícil la investidura, pero la gobernabilidad más fácil", y ahora a Rajoy le pasa "lo contrario", según han indicado a Efe fuentes cercanas al secretario general. 

Como ya hizo en el Comité Federal del pasado día 9, ha aprovechado para hacer una breve lectura de los resultados electorales del PSOE, los peores en toda la democracia. El secretario general ha vuelto a culpar de este saldo a "la confluencia de intereses a izquierda y derecha que intentó destruir al PSOE". "El PSOE resistió y somos la alternativa al PP", se ha felicitado Sánchez. 

En la nueva etapa que se abre, en la que Antonio Hernando y Óscar López van a repetir como portavoces en el Congreso y en el Senado, respectivamente, Sánchez ha pedido a sus parlamentarios "izquierda", "cercanía" y "ejemplaridad" en el trabajo de oposición. Ha anunciado que en cuanto se constituyan mañana las Cortes, el grupo socialista presentará un conjunto de medidas legislativas vinculadas a cuestiones de transparencia y ejemplaridad y a un proyecto político "netamente de izquierdas". Entre ellas, ha destacado la petición de crear una comisión de investigación sobre las escuchas en el Ministerio del Interior, tras exigir una vez más la dimisión "cuanto antes" de su titular en funciones Jorge Fernández Díaz. También ha mencionado otras iniciativas como la derogación de la reforma laboral, la paralización de la Lomce o la reconstrucción del Pacto de Toledo. Asimismo, Sánchez ha vuelto a exigir que el gobierno en funciones se someta al control del Parlamento después de que el PP lo rehuyera en la breve legislatura que ahora acaba.