¿Rescate político?

El "rescate político" de Andalucía que reclamó esta semana en el Parlamento andaluz el nuevo presidente del PP, Juan Ignacio Zoido, en un debate centrado en el Fondo de Liquidez Autonómico (FLA), puso de manifiesto la tentación que tuvo en su día el Gobierno, con Cristóbal Montoro a la cabeza, de subvertir los resultados electorales del 25-M. Sin embargo, desde hace algún tiempo, sobre todo desde el último Consejo de Política Fiscal y Financiera (CPFF) -no acudió Cataluña y Andalucía protagonizó una espantada-, esa estrategia es papel mojado, pero el alcalde de Sevilla no se ha debido enterar aún. Ahora, una vez incluido este mecanismo extraordinario en la Ley de Estabilidad Presupuestaria, Hacienda y Administraciones Públicas espera que todas las comunidades autónomas acudan una tras otra al FLA. Ya han se han apuntado Cataluña, Comunidad Valenciana, Murcia y Andalucía, y les seguirá el resto. Un rescate político de todas ellas -la mayoría controladas por el PP- es un escenario inverosímil hoy por hoy. Además, según se ha sabido estos días, las Comunidades Autónomas están cumpliendo satisfactoriamente con el objetivo de déficit del 1,5% fijado para 2012.

Inoportunos

La última Diada y la petición del presidente de la Generalitat, Artur Mas, de un Estado catalán independiente de España, han marcado la semana política. No le ha faltado razón a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, cuando ha destacado la inoportunidad de la reivindicación soberanista ante la grave crisis económica que sufre España, con Cataluña soportando ya una nómina de 700.000 parados. Sin embargo, no es menos cierto que el Gobierno tampoco ha estado muy fino con la reforma educativa en este preciso momento. Por lo que se sabe, con esta iniciativa, con más ideología que sentido común, no hace otra cosa que echarle más leña al fuego. Como no estaba el sector suficientemente enfadado con los recortes, ahora va el señor ministro de Educación y reactiva con sus ocurrencias el amplio frente del tupperware. En la manifestación de ayer, Wert se ganó a pulso las numerosas críticas que recibió a su destartalada gestión. Por algo es el peor ministro del Gobierno, según el barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS).

El modelo Telemadrid

Pero, al menos, contará con el apoyo de su esposa, Edurne Uriarte, que ha fichado recientemente por TVE como tertuliana de postín. Y con los telediarios, que ya enseñaron la patita el otro día relegando como quinta noticia la histórica manifestación de la Diada. Y es que la cabra empieza a tirar al monte. Y si no, que se lo pregunten a alguna redactora a la que pretendían imponer hasta las preguntas que tenía que hacer en una entrevista política. El modelo Telemadrid, la peor televisión autonómica de todos los tiempos, en estado puro.

Los retratos y sus costes

En esto de la austeridad, los políticos se la cogen últimamente con papel de fumar. En el pasado eran algo más espléndidos. Si no que se pregunten al contable del Ministerio de Trabajo (ahora de Empleo). Los retratos de Joaquín Almunia y Manuel Chaves, obras del pintor gaditano Hernán Cortés, costaron 15.025,30 euros cada uno. El de Javier Arenas, obra de Félix Revello del Toro, 3.000 euros más. Los menos costosos fueron el de José Antonio Griñán, obra de Covadonga Sarragua, con 3.756 euros, y el de Matilde Fernández, con 3.425 euros. Tal como están las cosas, para el de Fátima Báñez no se sabe si habrá fondos o, a lo peor, el pintor elegido está inmerso en un ERE.

Patxi y el Senado

Que el actual lehendakari, Patxi López, está haciendo las maletas, de eso no hay ninguna duda. Pero parece que el PSOE le está preparando acomodo en el Senado. El puesto de Marcelino Iglesias, jefe de la cosa socialista en la Cámara Alta, corre peligro. Dicen que el aragonés no transmite, que no coordina, que no da la talla. Vamos, que está como muchos altos cargos de la Ejecutiva Federal de Alfredo Pérez Rubalcaba. En fin, al vasco hay que ponerlo en órbita para que esté en posición de salida en las primarias que celebrarán los socialistas para elegir a su próximo candidato a la presidencia del Gobierno.

Tras la multitudinaria e histórica manifestación de la Diada, el presidente de la Generalitat, Artur Mas, se puso al frente de las reivindicaciones y reclamó en Madrid un Estado catalán independiente. Explicó que España y Cataluña se han fatigado mutuamente y deben separarse. Dijo que la transición está en marcha (algunos han hecho cuentas: costaría 40.000 millones de euros). Pero cantó la gallina cuando reclamó una soberanía fiscal plena y planteó que había que cambiar la solidaridad interregional imperante durante los últimos 30 años. En resumen: Mas pasta, señor Rajoy. En eso consiste la plenitud nacional, el mandato que llevará a La Moncloa.