Mientras muchos montan el belén o el árbol de Navidad en sus casas, el príncipe Carlos de Inglaterra y su esposa, la duquesa de Cornualles, han sido los primeros miembros de la realeza europea en hacer oficial la foto del christmas con el que quieren desearnos unas felices fiestas, una estampa típicamente invernal aunque atípica en cuanto a felicitaciones de la casa real inglesa se refiere. Lo cierto es que en los últimos tiempos la realeza del Reino Unido no para de sorprendernos: primero fue el anuncio oficial de la boda del príncipe Guillermo, segundo en la línea sucesoria al trono, con una plebeya, Kate Middleton, su novia de toda la vida. Y ahora se trata de su padre, el príncipe de Gales, el que hace pública una imagen como felicitación que bien podría haber sido tomada en un momento familiar. ¿Estará la monarquía inglesa cambiando?

Sea como fuere, muy sonrientes y luciendo prendas típicas escocesas para protegerse de las bajas temperaturas, Carlos de Inglaterra y Camilla se han decantado como imagen de su felicitación navideña oficial por el paisaje invernal de las pistas de esquí situadas en los alrededores del Castillo de Balmoral (Escocia), la conocida residencia vacacional de la familia real británica y la preferida del príncipe Carlos.

Un aspecto es evidente: que en sus anteriores christmas el príncipe Carlos nunca había optado por una imagen tan aperturista y desenfadada. En el 2008, Carlos y Camilla, ya casados, compartieron en su felicitación navideña una simpática anécdota que les había sucedido durante un acto oficial a causa de un fallo técnico. Cada uno con un paraguas para protegerse del aguacero, se dejaron vencer por la risa cuando en la ceremonia bautismal de un buque que llevaba el nombre de 'Duquesa de Cornualles', se produjo un pequeño accidente inesperado: la bandera que cubría la placa con el nombre de Camila se desprendió y fue a parar al paraguas de la esposa del príncipe. Ésta, hasta la fecha, había sido la estampa más original que había usado la pareja para felicitar las fiestas. Pero este año han dado un paso adelante más.

Aparte de las de la pose estudiada ante el fotógrafo en alguna de las residencias oficiales del príncipe Carlos, la felicitación del año 2005 fue, sin duda, una de las más especiales, por tema emotivo, para la pareja. Y es que no sólo era la primera vez que Camilla aparecía en la postal navideña de la familia sino que además se trataba de una de las fotografías oficiales del día de su boda. En la imagen, que fue tomada en el castillo de Windsor el día el 9 de abril de ese año, la jornada del enlace, los recién casados aparecen rodeados de los hijos del príncipe Carlos, Enrique y Guillermo, y los de su esposa, Laura y Tom. Todos sonrientes y a pesar de la oficialidad del momento, la felicidad traspasaba más allá del objetivo de la cámara.

Se desconoce, por el momento, si el príncipe Guillermo y su prometida, Kate Middleton, también distribuirán, por primera vez juntos tras anunciarse su compromiso, un christmas de Navidad. Aunque, teniendo en cuenta la imagen de familia feliz que todos quieren dar en la familia real inglesa en los últimos años, probablemente lo hagan. No en vano la pareja representa la continuidad de una corona maltrecha durante mucho tiempo para la prensa.