Un grupo de empresas y familias afectadas por las expropiaciones del Metro de Granada en el tramo de Albolote a Maracena, a quienes la Junta de Andalucía adeuda unos 9 millones de euros, se concentraron ayer para exigir el pago del dinero y amenazar con movilizaciones durante las pruebas del primer vagón.

A esta protesta se han sumado representantes de cuatro empresas y una familia a quienes le fueron expropiados terrenos que tenían uso industrial y comercial.

"No nos negamos a que nos expropien, pero que nos paguen y no nos arruinen", ha señalado José Hidalgo, uno de los afectados.

La semana pasada se reunieron con el delegado de Fomento y Vivienda de la Junta en Granada, Manuel Morales, que les propuso fraccionar los pagos, a lo que los afectados se oponen. Los afectados han anunciado su intención de continuar con las protestas y no descartan la posibilidad de movilizarse cuando se lleven a cabo las pruebas del primer vagón del Metro.