La expresión 'vendedor de crecepelo' es una especie de eufemismo de la palabra mentiroso. Sin duda, es difícil encontrar a personas que no tengan 'pelos' (ni intereses) en la lengua. Martín Domingo, con sus polémicas y críticas publicaciones, ha conseguido triunfar en la red a través de su blog de opinión, 'El vendedor de crecepelo', que ahora también le da nombre a su libro. De hecho, sus publicaciones online tienen más de 72.000 visitas, en las que se recogen comentarios sobre todo tipo de temas de actualidad y que se han hecho popularmente conocidos. Pero, ¿qué tiene de diferente este blog de opinión? Una de las razones por las que estas publicaciones se diferencian del resto radican en la libertad con la que se expresa Domingo. De hecho, Ignacio Camacho, escritor del prólogo, destaca la capacidad de este columnista por transmitir sus ideas. "No me gusta el 'pensamiento pack' ese que te obliga, dependiendo de tu ideología, a asumir todas las opiniones que se le atribuyen. Prefiero pensar por mi cuenta y los lectores de opinión agradecen la autonomía moral del columnista. No hay nada más objetivamente subjetivo que un artículo. Sería un error malbaratarlo recurriendo a tópicos o lugares comunes", señaló Domingo. El libro de El vendedor de crecepelo hace que "la gente de derechas piense que es de izquierdas y gente de izquierdas lo cree de derechas", comentó el escritor.

Algunos de los problemas de la nación podrían venir por los "complejos" que la misma derrocha a sus anchas, aseguró Domingo. "Una prueba es el problema del separatismo, que se ha ido engordando desde el propio Estado por su grave dejación de funciones, sobre todo en educación. Y el problema será mayor en el futuro porque ya hay toda una generación de vascos y catalanes que se ha educado en el odio a España. Todo perfectamente financiado con los impuestos de los españoles. Dígame qué país habría consentido semejante dislate: sólo uno lleno de complejos como el nuestro", aseveró el escritor. El columnista también habló de la "envidia" que siente hacia los articulistas capaces de escribir "mientras se alivian en el baño". Ante esto, el polémico bloguero aseguró que todos los artículos de su libro han sido trabajados concienzudamente y han visto la luz tras un esfuerzo notable. "Me gusta ser riguroso con el lenguaje y la falta de talento innato la suplo con trabajo", señaló Domingo. Además, el escritor ha mostrado su deseo de que los lectores se diviertan y se emocionen con su libro, para "cabrearles y hacerles reflexionar". "A los lectores, me gustaría unas veces pellizcarles y otras zarandearles, para que cuando acaben el libro, no acaben con la sensación de haber perdido el par de tardes que se tarda en leerlo", relató el escritor.

Una de las entradas online, también recopiladas en el libro, con más repercusión social fue "una que dediqué al discurso que leyó Miguel Ríos en la entrega del título de 'Hijo Predilecto de Andalucía'. El escritor relató que, a pesar de "la profunda admiración que le profeso, le recriminé el tono mitinero y demagógico, que buscaba el aplauso fácil de los colegas tuiteros y de la prensa afín. Él, que siempre ha sido valiente, en una ocasión tan especial nos quiso dar gato por liebre, intentando presentar como audaz y reivindicativo un alegato cobardón y pelota con el poder que le premiaba", dijo Domingo. El artículo tuvo más de cinco mil visitas en un solo día.