Varios colectivos de parados reunidos ayer en Granada han solicitado a los ayuntamientos andaluces ayudas para evitar desahucios y pagar deudas en "situaciones extremas" de familias que se vean impelidas por los bancos a dejar sus casas por atrasos en hipotecas o alquileres.

"La única salida es buscar un puesto de trabajo", declaró Andrés Bódalo, de la plataforma de parados del Polígono del Valle de Jaén, antes de la mesa redonda celebrada en Maracena, pero existen "otras iniciativas para salir del paso" ante las que ha pedido que los "ayuntamientos se impliquen".

La experiencia jiennense comenzó con el listado de unas trescientas personas de este barrio que manifestaron tener atrasos en los pagos de la vivienda así como en suministros de agua y electricidad.

Tras un "estudio riguroso", según Bódalo, para ver qué casos requerían de una ayuda más urgente, la plataforma de parados en coordinación con distintas concejalías del Ayuntamiento de Jaén articularon proyectos como un cátering para personas con falta de recursos para alimentar a sus familias o el adelanto de letras de hipotecas en algunas "situaciones extremas" para evitar desahucios.

Tanto en Granada como en Barcelona han tenido lugar hace una semana los casos de sendas prórrogas de un mes por parte de entidades bancarias para que, según lo estipulado por la ley para estas situaciones de emergencia, ambas familias puedan buscar alternativas antes de abandonar sus casas por impagos.

La jornada abordó situaciones como las que se dan tras los desahucios pese a los cuales no desaparecen las deudas pendientes con las entidades bancarias.

"No puede ser que los sectores más débiles de la sociedad se queden sin derecho a la vivienda", ha señalado al respecto Francisco Cabrerizo, del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) que participó junto con las asociaciones de parados y la Confederación General del Trabajo (CGT).