Juana Rivas confirmó ayer que ha podido retomar el contacto con sus hijos en Italia, donde permanecen desde que se los entregara al padre, Francesco Arcuri, a finales de agosto, aunque acusa a su expareja de "no ponérselo fácil" en las comunicaciones y dice que nota a los niños "cada vez con más miedo". "Yo he dado la cara ante el maltrato, pero al final me he quedado sin mis hijos", lamentó Rivas en una entrevista concedida a TVE y recogida por EuropaPress, después de que hace dos semanas declarara ante el Juzgado de Instrucción 2 de Granada en calidad de investigada por permanecer casi un mes ilocalizable con los menores sin acatar la orden judicial que le obligaba a entregarlos al padre, condenado en 2009 por lesiones en el ámbito familiar y al que en 2016 denunció por malos tratos.

Rivas explicó que, tras las acciones emprendidas por sus abogados, ha podido retomar el contacto con los pequeños, de once y tres años, por videoconferencia o por teléfono. A su juicio, están "descolocados" y cree que les están "manipulando" e "infundiendo miedo para que no hablen de lo que están viviendo".

Los abogados de la madre de Maracena levantaron a principios de septiembre acta notarial para acreditar que Juana no había podido comunicarse con sus hijos pese a sus múltiples intentos y enviársela al equipo jurídico que está llevando el caso en Italia. La petición se hizo como un procedimiento inauditaparte, que consiste en una posible resolución del juez sin dar audiencia o sin escuchar a la otra parte.

La vista para dirimir sobre la guardia y custodia de los pequeños se celebrará el próximo 31 de octubre en Italia. Desde este país, el abogado que está representado a la expareja de Juana Rivas argumentó que se han violado los derechos de los niños por la conducta "acelerada" de la madre, al decidir de manera "arbitraria" sustraerlos del cuidado de su padre y "alejarlos de la vida que conocían", lo que, según agregó, es un "delito muy grave" para el que hay previsto "pena de cárcel y privación de la patria potestad".

En el ámbito civil, los letrados de la expareja de la madre de Maracena prevén pedir resarcimiento por el daño derivado de la difamación que a su juicio ha sufrido su cliente, por las noticias aparecidas en medios y por las declaraciones de la propia Rivas, lo cual será denunciado en Italia.

El abogado que defiende los intereses del padre garantiza además que los niños están ahora "muy integrados" en Italia, donde podrán retomar su "vida normal" con el tiempo y la ayuda psicológica que precisen.