El Metro es una locomotora de números. Ya ha alcanzado los dos millones de viajeros en sus dos primeros meses de funcionamiento y, como efecto colateral, ha propiciado un incremento en el uso del transporte público. En octubre el impacto fue de un 14% más de usuarios, datos que se confirman en noviembre con un 12%, lo que le convierte en el gran catalizador de la movilidad sostenible. Y todo está a la espera de que se haga efectivo el transbordo gratuito entre el Metro y los buses de la Rober, un acuerdo marco que ayer ratificó el Consorcio Metropolitano de Transportes para que se haga efectivo en el plazo de ocho semanas y cuyo coste asumirá el Ayuntamiento con los 800.000 euros de aportación extraordinaria de la Junta de Andalucía, que se suman a los 1,5 millones de euros que el Consistorio viene recibiendo como aportación por los transbordos entre los autobuses del Área Metropolitana y los de la capital. La Junta sólo exige que este dinero se dedique a políticas de movilidad sostenible, con lo que una de las interrogantes de esta medida es si los 800.000 euros alcanzarán para sufragar el montante anual de los transbordos o si el Ayuntamiento tendrá que 'rascarse el bolsillo' para garantizar la viabilidad de esta iniciativa. Cada transbordo cuesta 0,62 céntimos, con lo que, de momento, tendrá un colchón para sufragar hasta casi 1,3 millones de transbordos. "Es una decisión sobre sus cuentas que debe tomar el Consistorio", puntualiza la delegada de Fomento de la Junta, Mariela Fernández-Bermejo, que en este contexto advierte que se ha detectado que no hay un gran número de transbordos entre la Rober y el Metro, mientras que los que se producen con el autobús metropolitano aumentan cada día.

Con este acuerdo la ciudad se equipara a Sevilla y Málaga en cuanto a las condiciones de acceso a la red municipal de autobuses urbanos a los usuarios provistos con las tarjetas de transporte multimodal del Consorcio. Y, aunque desde el Consistorio se dio una fecha aproximada de ocho semanas para conseguir la gratuidad de los transbordos, Mariela Fernández avanzó ayer que es posible que se reduzcan los plazos para la puesta en marcha del proyecto. "Es una cuestión estrictamente informática porque hay que programar la tarjeta para que descifre si se usa dentro o fuera de la capital, algo que se hace a través de un posicionamiento GPS", señaló ayer Fernández Bermejo en su última comparecencia como delegada, ya que poco después el Consejo de Gobierno aprobó su nombramiento como gerente de la Agencia Pública de Puertos de Andalucía. "Es simplemente una adaptación del software, no hace falta ni instalar nuevas máquinas expendedoras ni validadores en los vagones, por lo que es posible que se acorten los plazos", subrayó.

El consejo de administración del Consorcio aprobó el presupuesto para 2018, situándolo en 13,03 millones de euros, lo que supone un crecimiento del 0,7% respecto a 2017. Este crecimiento viene motivado porque contempla el Metro de Granada operativo durante todo el ejercicio 2017. El director general de Movilidad de la Junta, Rafael Chacón, subrayó que la aportación de la Junta de Andalucía crece el 7,1% respecto a 2017, alcanzando un total de 2.634.701 euros, lo que supone que la participación real de la Junta pase a ser del 78,63% (77,45% en 2017). Las aportaciones de las entidades locales se mantienen en 2018 igual a las del presupuesto 2017, es decir, 716.062 euros. "La puesta en marcha del Metro de Granada ha supuesto un gran impacto en el sistema del transporte público metropolitano y en los desplazamientos dentro del municipio de Granada, incidiendo incluso en los hábitos de los ciudadanos, de ahí que igualemos las condiciones con las capitales de Sevilla y Málaga, de manera que el Ayuntamiento lo repercuta en mejorar de la movilidad urbana", apuntó Chacón. En este sentido, está previsto que en las próximas semanas se firme el acuerdo definitivo para los transbordos gratuitos entre el alcalde de Granada y el consejero de Fomento, Felipe López.

Y antes de poner rumbo a Sevilla en la Agencia Pública de Puertos, Fernández-Bermejo dejará lista la reorganización de las líneas de autobuses interurbanos, que entrarán en funcionamiento el próximo mes de enero. En ese sentido, una de las "sorpresas" que ha deparado el Metro desde su inauguración está en la línea de La Zubia, que cuenta con un intercambiador en la zona del Palacio de Deportes que, desde que ha entrado en funcionamiento el Metro, ha aumentado su tránsito en un 20%.

"La gente ha entendido que puede coger su autobús, subirse en el Metro y de ahí ir a donde quiera, lo que se ha conseguido sin ningún tipo de promoción en la línea y se ha llevado a cabo de manera natural", apunta Fernández-Bermejo, que señala que ya hay previstos cambios en las líneas de Jun, Peligros o Pulianas para que tengan un punto de conexión con el Metro. "Estamos revirtiendo la situación que causó en su momento la LAC, que a lo mejor no era un mal sistema pero en Granada no se aplicó de la manera más correcta porque implicaba que, sobre todo los habitantes del Área Metropolitana, tuvieran que realizan un mínimo de dos transbordos en sus viajes. Con el Metro es al revés, con un solo transbordo puede viajar a cualquier lugar de Granada", concluye.