En una de sus últimas declaraciones sobre los ediles del PP imputados en el caso Serrallo, el presidente del PP andaluz, Juanma Moreno, se mostró inflexible al afirmar que, en caso de abrirse juicio oral, serían expulsados de inmediato según recogen los estatutos del partido. De estas palabras a las pronunciadas ayer , en las que señaló que "no cabe ahora plantearse una posible renovación de parte del grupo municipal por esta circunstancia", media la decisión de la Fiscalía de no acusar a los seis concejales del PP que están procesados en el caso.

Juanma Moreno abogó por "dejar que la justicia actúe" y que lo haga "lo antes posible", después de que la Fiscalía haya despejado el camino de los ediles Telesfora Ruiz, Fernando Egea, Juan García Montero, María Francés, Juan Antonio Fuentes y Francisco Ledesma tras pedir el archivo de las actuaciones. En todo caso, la jueza instructora podría incluirlos en el auto de apertura de juicio oral atendiendo a las peticiones del resto de acusaciones, Vox, Tomás Olivo y un funcionario jubilado, que sí los consideran responsables de un posible delito de prevaricación.

A preguntas de los periodistas en el acto celebrado en la Cámara de Comercio, Moreno rehusó "interpretar" la decisión del Ministerio Público por entender que es un "caso judicializado" y que el fiscal toma sus decisiones en función "lógicamente" de los hechos y las pruebas a las que tiene acceso a través de las investigaciones policiales.

En el mismo acto, Moreno lamentó que Andalucía lidera las cifras del paro por cuarenta años de "recetas antiguas", una asfixia burocrática y la presión fiscal, para reiterar, como hizo en su anterior visita en marzo a la sede de la Confederación Granada de Empresarios, que creará 600.000 puestos de trabajo para que la comunidad sea la locomotora del empleo en España, algo que se comprometió a firmar "ante notario".