Son caminos para alejarse de los malos humos de la ciudad y del tráfico, para conectar la ciudad con su entorno natural. El programa de Puertas Verdes de la Consejería de Medio Ambiente se propone recuperar las vías pecuarias y crear en ellas senderos para ir a pie o en bici. El Ayuntamiento de Granada acaba de aprobar la concesión de licencia a Medio Ambiente para el inicio de la obra que permitirá dar forma a la conexión de las vías pecuarias del entorno de Granada y crear espacios de ocio al lado de los caminos de servicio de los ríos Genil, Beiro, Dílar y Monachil, según informó ayer la Gerencia de Urbanismo.

El circuito, de 18,5 kilómetros de longitud en total, arranca en el carril-bici que hay en la capital junto a la Circunvalación y continúa su curso por el camino de servicio del río Beiro, en dirección a los municipios de Vegas del Genil, Churriana de la Vega y después a Armilla, volviendo finalmente de nuevo a la capital. El trazado afecta a ocho localidades, ya que el camino discurre también por los términos municipales de Cúllar Vega, Las Gabias, Alhendín y Ogíjares.

Para la Puerta Verde de la Aglomeración Urbana de Granada la Junta prevé una inversión de cerca de tres millones de euros. En el término de Granada, por donde pasarán cuatro tramos de unos cuatro kilómetros en total, el presupuesto de ejecución asciende a los 900.000 euros, según los datos de Urbanismo, y el plazo es de 36 meses.

Esta nueva Puerta Verde, junto a otra que se proyecta entre los municipios de Santa Fe y Alhama, de 28,5 kilómetros de longitud, completarán un entramado en la provincia de más de 175 kilómetros de este tipo de vía, al sumarse a los diez Corredores Verdes de la Aglomeración Urbana de Granada, que ya están en uso, con 130,5 kilómetros que pasan por una veintena de municipios.