Después de hacerse público hace unos días que el pleno del Tribunal Constitucional (TC) ha admitido a trámite el recurso del Gobierno central contra el decreto de la Junta de Andalucía que devolvía a los empleados públicos andaluces la jornada de 35 horas semanales, que queda suspendido de forma cautelar, comienzan a conocerse los efectos que este nuevo cambio en la jornada laboral tendría en la provincia de Granada.

En concreto, el sindicato CCOO informó ayer del efecto de la vuelta a las 37,5 horas semanales en el sector sanitario. Así, el sindicato denunció ayer, la impugnación de la jornada de 35 horas supondría la destrucción de aproximadamente 300 empleos públicos en los centros sanitarios de la provincia de Granada.

"El gobierno del PP, siguiendo las directrices de la troika europea para disminuir el número de trabajadores al servicio de la administración pública, promulgó la tasa de reposición, cubriéndose solo el 10% de las jubilaciones en Sanidad, Educación y Justicia. También estableció la jornada de 37,5 horas semanales en todas las administraciones públicas", recuerda el sindicato CCOO, que añade que "el gobierno de la Junta de Andalucía fue un diligente cumplidor de ambas medidas, convirtiéndose en el gobierno autonómico que más recortes ha efectuado". Esto supuso, según los datos sindicales, una pérdida de casi 1.200 empleos en el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en la provincia de Granada hasta el 2015, lo que en su momento ya denunció CCOO, según informó ayer en un comunicado.

El sindicato relata que a final de 2016 el gobierno de Susana Díaz "se enfrentó al de Mariano Rajoy y ordenó la vuelta a la jornada de 35 horas semanales a partir de enero de 2017. El PP ha impugnado dicha orden, como ya lo hizo con las de otras comunidades autónomas".

Este retroceso en la jornada laboral en el SAS es lo que provocaría la pérdida, según CCOO, de los empleos que "se habían recuperado". "Hablamos de unos 300 puestos de trabajo de todas las categorías creados para volver a la jornada de 35 horas y que aún quedan lejos de los 1.200 puestos perdidos en el SAS en Granada", según los cálculos del sindicato. Y advierte: "La vuelta atrás en los escasos avances en alcanzar la plantilla perdida nos llevaría a los años más negros y precarios de la sanidad pública de Andalucía". Por tanto, CCOO Sanidad de Granada le pide al gobierno del PP que retire la impugnación a la jornada de 35 horas y que pida al Constitucional que anule la suspensión cautelar. También solicita a Susana Díaz que si Rajoy persiste en su cometido, se declare "insumisa" y mantenga las 35 horas en la administración.