política municipal | un año de socialismo en la alcaldía

El alcalde recoge las calificaciones de su gestión

  • Los grupos de la oposición suspenden categóricamente a Paco Cuenca en su primer año de mandato, mientras los representantes institucionales de su partido subrayan la caótica situación que recibió como herencia política

Paco Cuenca se pone un 7 como alcalde de Granada; Rocío Díaz, portavoz del PP, baja su calificación a un 0,5. Y mientras IU y Ciudadanos le otorgan un suspenso categórico, Vamos Granada lleva al límite su espíritu asambleario y mantiene la calificación de 2,2 que le dieron en una votación el día anterior a la investidura. En su defensa y en sus crítica hay un océano de lugares comunes, desde la catastrófica situación económica que se encontró y la necesidad de "higienizar" la institución tras el estallido de la operación Nazarí, hasta la tendencia a ser el niño en el bautizo, el novio en la boda y el muerto en el entierro que le achacan desde la oposición.

Las instituciones de la ciudad gobernadas por el PSOE trazan el perfil de un hombre tenaz y dialogante. "Es meritorio el esfuerzo del alcalde y sus concejales por devolver la dignidad a la gestión municipal, hacer transparente la gestión, sanear y equilibrar las cuentas y sumar esfuerzos por Granada", señala la delegada del Gobierno de la Junta, Sandra García. "Ha demostrado que se puede gobernar desde el consenso y la lealtad institucional y, al mismo tiempo, ser reivindicativo para mejorar la ciudad de Granada", señala por su parte José Entrena, presidente de la Diputación. Entre los halagos desaforados y la crítica feroz se encuentran opiniones como la de Gerardo Cuerva, presidente de la Confederación Granadina de Empresarios, que destaca la "buena voluntad y la cercanía" del alcalde, pero echa en falta "que se materialicen proyectos concretos que incidan en el desarrollo de la ciudad".

En el negativo de esta foto de mandato está la opinión de Rocío Díaz, que reconoce su capacidad para sobrevivir con ocho concejales, pero le acusa de inmovilismo, de no tomar una decisión desde su llegada a la Alcaldía y de tener a la ciudad sumida en el "desgobierno". Y, como el resto de grupos políticos, le echa en cara que se haya "plegado ante sus siglas y sus jefes de Sevilla" en problemas como el Metro o la reordenación hospitalaria, mientras entraba en guerra con la administración central en asuntos como el AVE, "cuya obra no ha acabado por un problema técnico", señala Díaz.

Manuel Olivares, portavoz de Ciudadanos, ve a una ciudad "paralizada" con un alcalde "centrado en venderse a sí mismo, promocionarse y utilizar el Ayuntamiento como escaparate propio y no en beneficio de la ciudad". Por su parte, Marta Gutiérrez, de Vamos Granada, justifica su apoyo a la investidura como un mal menor. "Había que sacar al PP de la Alcaldía, eso estaba claro, hicimos bien y hoy haríamos exactamente lo mismo, pero Cuenca ha demostrado no ser la solución y eso es un problema", afirma.

Aprobado o suspenso, Paco Cuenca repetirá un año más como alcalde de Granada.

Sandra García, Delegada de la Junta: "Es meritorio el esfuerzo por devolver la dignidad a la gestión municipal"

El equipo de gobierno local que encabeza Francisco Cuenca toma las riendas de la ciudad después de unos hechos muy graves que tienen todavía al alcalde anterior inmerso en un proceso judicial y que pusieron de manifiesto una forma de gobernar sectaria e irresponsable -los tribunales dirán si también ilegal- que todavía tiene consecuencias gravosas para la ciudadanía. El nuevo equipo de Gobierno ha dejado claro en este corto año que se puede gobernar de otra manera, con transparencia, diálogo, búsqueda de consenso y poniendo los intereses generales por encima de todo. El alcalde ha normalizado las relaciones institucionales y se ha involucrado en los proyectos que interesan a Granada, como la Mesa por el Ferrocarril, el aeropuerto, el Centro Lorca, el diálogo entre la Alhambra y el Albaicín, el eje Granada-Motril, el eje turístico Sevilla-Málaga-Granada-Córdoba, o la apuesta por Granada Capital Cultural y la defensa de la Capitalidad de la Justicia, por citar algunos ejemplos. La desastrosa situación financiera en la que el PP ha dejado el Ayuntamiento y la sombra de la corrupción han marcado, inevitablemente, y han hecho muy difícil este año de gestión del nuevo equipo, que está haciendo un esfuerzo titánico por superar las dificultades. Es meritorio el esfuerzo del alcalde y sus concejales por devolver la dignidad a la gestión municipal, hacer transparente la gestión, sanear y equilibrar las cuentas y sumar esfuerzos por Granada, por sacar adelante un proyecto de ciudad para todos y todas.

Sebastián Pérez, presidente del PP de Granada: "Carece de proyecto y está más preocupado por salir bien en las fotos"

Lo más positivo de este año de gestión es que los granadinos se han dado cuenta de que un tripartito, respaldado por la izquierda más radical, es nefasto para Granada. Ya tuvimos un antecedente. Durante sus años en la oposición decía poseer la solución a todos los problemas que afectaban a esta ciudad. Llegado al gobierno parece haber perdido esa varita mágica, no se le conoce gestión relevante ni proyecto de envergadura alguno para la mejora de Granada. Carece de proyecto político y ha estado más preocupado en salir en buen lugar en las fotos. Ha mostrado una actitud beligerante con las administraciones donde gobierna el PP. Sin embargo, ha estado ausente y no ha sido capaz de defender los intereses de los granadinos cuando ello suponía plantarle cara al Gobierno de Susana Díaz. Nota: 0,75.

Pilar Aranda, rectora UGR: "Estos meses el alcalde ha mostrado una clara voluntad de acercamiento"

Durante estos meses el alcalde ha mostrado una clara voluntad de acercamiento y una actitud dialogante con la Universidad de Granada que se ha concretado en proyectos de enorme importancia para la ciudad en los que universidad y ciudad están trabajando en común: la candidatura de Granada a la capitalidad cultural coincidiendo con el V Centenario de la UGR o la apuesta conjunta por el proyecto del acelerador IFMIF-DONES, son dos claros ejemplos de simbiosis entre ambas instituciones. Así mismo, la Alcaldía cuenta con el apoyo de la Universidad en todo lo referente a sus demandas en el campo de las infraestructuras y las políticas sociales y de empleo.

Teresa Jiménez, secretaria gral. PSOE Granada: "Tras la operación Nazarí los granadinos vuelven a confiar en su Ayuntamiento"

El balance es positivo. Pese a la ruina económica, los problemas, la parálisis, la sombra de la corrupción y el oscurantismo por los que se han caracterizado los 13 años de gestión del PP, el equipo de gobierno socialista ha normalizado la vida política del Ayuntamiento. Es evidente la transparencia que ahora impera en la plaza del Carmen. Nadie duda de la valía de Paco Cuenca, un alcalde dialogante, reivindicativo y conocedor de los problemas de esta ciudad y de sus barrios que intenta por encima de todo dar respuesta y mejorar el día a día del conjunto de la ciudadanía. Después del escándalo de la operación Nazarí, los granadinos vuelven a confiar en su Ayuntamiento. En un año se ha logrado proyectar y sentar las bases de una nueva Granada. Se han abierto las puertas del Consistorio y se han reconstruido las relaciones que hizo saltar por los aires la política de bronca que el PP practicó contra todo el que no pensaba como él. Además, Paco Cuenca ha sabido canalizar las demandas de la ciudadanía en asuntos como el aislamiento ferroviario, la rehabilitación de Santa Adela o el posible traslado de las secciones del TSJA. En definitiva, ha situado a las personas en el centro de su política y ha tendido la mano y reconstruido puentes con el resto de administraciones. A pesar de la mala situación económica ocasionada por el PP, el equipo de gobierno socialista trabaja para sanear las arcas municipales. Todo ello, manteniendo todos los servicios públicos y sin subir los impuestos. Algo que demuestra que otra gestión es posible. Lamentablemente la falta de cooperación de la oposición municipal, especialmente de algunos partidos, como el PP, instalados en el frentismo y empeñados en enturbiar la vida de la ciudad, tampoco contribuye a la estabilidad política ni a la gobernabilidad en la que Paco Cuenca trabaja cada día con ilusión y ganas.

José María Rueda, secretario general PSOE de la capital: "Ha sido el primer año de apertura de puertas, de transparencia y decencia"

La ruinosa y lamentable herencia recibida de 13 años nefastos del PP, sumada a la falta de colaboracion del resto de grupos municipales, sólo pendientes de su estrategia política de cara a las elecciones del 2019, han impedido la adopción de medidas estructurales de cambio en el Ayuntamiento y en la ciudad. Por ello, cabe destacar este primer año como el año de la apertura de puertas, de la transparencia y de la decencia en la vida pública de Granada. Nota: 8, pues la perfección no existe.

José Entrena, presidente de Diputación: "Ha demostrado que se puede gobernar con lealtad y ser reivindicativo"

El balance del equipo que preside Paco Cuenca en su primer año de gestión ha sido positivo. Ha demostrado que se puede gobernar desde el consenso y la lealtad institucional y, al mismo tiempo, ser reivindicativo para mejorar la ciudad. Como fortaleza destacaría su capacidad de diálogo con las restantes instituciones de la provincia y sectores sociales para establecer líneas de trabajo en común que nos permitan recuperar cuestiones de importancia para la ciudad que se habían perdido en la última década. Destacaría el impulso cultural que pretende darle a la ciudad o la designación de Granada como Ciudad de la Ciencia, además de la política de transparencia que viene desarrollando el actual gobierno municipal. La principal debilidad, desde mi punto de vista, es la situación económica del Ayuntamiento que ha heredado este equipo de gobierno, con un endeudamiento galopante; una situación que para cualquier institución supone un serio inconveniente para desarrollar proyectos y actuaciones.

Gerardo Cuerva, Confederación granadina de empresarios: "Granada necesita concretar proyectos que generen riqueza y empleo en la ciudad"

Desde la CGE destacamos positivamente en la economía granadina. Entendemos que gobernar en minoría hace que las decisiones puedan ser más lentas, al necesitar el apoyo de la oposición para sacar adelante las propuestas del equipo de gobierno, pero Granada necesita concretar proyectos que generen riqueza y empleo en la ciudad. Por otro lado, nos preocupa enormemente la situación económica que atraviesa el Ayuntamiento de Granada y que indiscutiblemente repercute en el pago a las empresas y autónomos proveedores del ente municipal.

Manuel Olivares, portavoz de Ciudadanos: "Un alcalde no puede levantarse por las mañanas y mirarse al espejo"

Lamentablemente, Granada está viéndose salpicada de manera continua por sombras de corrupción que hacen que los últimos titulares de prensa sean más de sucesos que de logros. Paco Cuenca llegó a la Alcaldía con un clara obligación: abrir puertas y ventanas para que la corrupción y la mala gestión llevada a cabo por el PP de Torres Hurtado saliese del Ayuntamiento. El Partido Socialista cuenta con un alcalde que está solo y que no es escuchado como debería en su propio partido. Esta carencia del liderazgo, necesaria para colocar los intereses de los granadinos por delante de los de su partido cuando ambos chocan, está provocando un efecto negativo evidente. Un alcalde no se puede levantar por las mañanas y mirarse al espejo; debe abrir la ventana y mirar su ciudad. Lejos de lograr objetivos comunes, Cuenca está centrado en venderse a sí mismo, promocionarse y utilizar la Alcaldía como escaparate propio y no en beneficio de la ciudad. Vemos múltiples convocatorias que parecen tener la intención de 'Carmenizar el Ayuntamiento' con una participación sesgada e interesada, intentado engañar a la ciudad y no tomando medidas con la excusa de escuchar, cuando en verdad dilata la ejecución de ellas. ¿El resultado? Una ciudad paralizada y anclada. El balance de gestión queda en evidencia con un sólo ejemplo que demuestra todo: No tener presupuestos es un claro ejemplo de incapacidad de negociación; no tan solo presentarlos es una muestra evidente de ineficacia de gobierno que terminan pagando los granadinos. En Ciudadanos estamos dispuestos a colaborar como siempre hemos hecho, a tender puentes y acabar con la confrontación, para ello es necesario tener una altura de miras que hoy día, desgraciadamente, no estamos encontrando en quien está al frente del equipo de gobierno. Si bien todo se inició con normalidad y con intención de colaborar después de vivir una de las mayores vergüenzas en este Ayuntamiento, pronto Paco Cuenca apagó toda luz sobre las declaraciones públicas que anunciaban buenas voluntades. La buenas voluntades deben traducirse en buenas acciones y, lamentablemente, nos encontramos con un alcalde personalista, más preocupado del foco mediático personal que en mejorar la ciudad. Detrás de cada anuncio público no hay proyecto, detrás de cada foto no hay un alcalde, sino un hombre que se vende a sí mismo. Desgraciadamente, al otro lado del río, el Partido Popular se encuentra en una situación continua de sombra por culpa de la corrupción y por culpa de una gestión que hoy está en los tribunales.  Nota: 3,5

Desde Ciudadanos le damos claro suspenso con un necesita mejorar... Porque además, pensamos que los deberes atrasados le están superando.

Marta Gutiérrez, portavoz de Vamos Granada: "El alcalde ha seguido la hoja de ruta del PP por imposición de C's"

Hay una cosa que tenemos clara: En Granada no se ha producido un cambio. Un alcalde del Partido Socialista ha sustituido a un alcalde del Partido Popular, pero en lo importante no ha habido cambios, ni en las políticas, ni en el rumbo económico, ni en el modelo de ciudad. Cuenca ha seguido la hoja de ruta del PP, algo que por cierto fue una exigencia de Ciudadanos al apoyar su investidura, el que nada cambiara. Nosotros advertimos hace un año que investir a Cuenca servía para tener a un alcalde libre de sospecha de corrupción, pero que si queríamos cambiar la ciudad teníamos que llegar a grandes acuerdos, políticos y con la sociedad. Esto nunca se produjo y, para colmo, el nuevo alcalde también acabó imputado por su gestión como delegado en la Junta. El balance, por tanto, no es positivo, había que sacar al PP de la Alcaldía, eso estaba claro, hicimos bien y hoy haríamos exactamente lo mismo, pero Cuenca ha demostrado no ser la solución y eso es un problema. Granada sigue necesitando el cambio que sí están llevando a cabo otras ciudades como Madrid y Barcelona, que están saneando las cuentas y a la vez aumentando el gasto social. Para salir de la difícil situación del Ayuntamiento y de la ciudad es necesaria una apuesta valiente, y en ello estamos trabajando. Las luces que vemos son las que ha encendido la gente de Granada. En unos años en los que por fin hemos visto el verdadero legado del PP, que se recoge en el sumario de la operación Nazarí y en las cuentas maltrechas del Ayuntamiento, la ciudad ha despertado y se ha movilizado para defender lo suyo, sus hospitales y sus trenes, y más cosas que están por llegar. Esa es la luz y es algo muy grande. Sin embargo, el PSOE se ha puesto de lado, e incluso en contra, en las reivindicaciones ciudadanas, y en lo institucional la gestión socialista está manteniendo casi todas las sombras de la gestión anterior. Un ejemplo: se mantiene exactamente la misma política de contratación privatizada en el Ayuntamiento, un sistema que aumenta los costes y precariza los servicios y las condiciones laborales. Se han vuelto a nombrar a dedo todos los puestos directivos. El asunto económico lo tienen abandonado y vemos que el gobierno local no tiene mucha idea de lo que hacer, ni tienen propuestas propias ni escuchan las de los demás. Ahora mismo, la ciudad está aislada hacia fuera y paralizada desde dentro. La buena noticia es que estamos a tiempo de cambiarlo aunque hay que comenzar ya. Nota: 2,2Nosotros lanzamos una iniciativa pionera para el día de la investidura: habiendo visto la propuesta del PSOE para la investidura, que básicamente era hacer alcalde a Cuenca sin un acuerdo político que lo sustentara, los inscritos de Vamos, Granada votaron y le pusieron un 2,2 el día antes de la investidura, esa era la nota de partida. Y fue así porque Cuenca se ha negado sistemáticamente a adquirir compromisos, antes y ahora, para un cambio en la gestión municipal y en el modelo de ciudad, por mucho que venda lo contrario el diálogo del que presume no existe, y eso es exclusivamente su responsabilidad porque tiene un par de cajones llenos con las propuestas de Vamos, Granada. Por eso, si tuviéramos que revisar ese 2,2 del que partía, no creemos que mejorara mucho. Al final, su mandato se va a definir por una pocas cuestiones clave que se resumen en la siguiente: ¿es un alcalde que haya defendido su ciudad? Pensamos que no, porque no se puso del lado de la ciudad respecto a la fusión hospitalaria. Después de la operación Nazarí, Granada necesitaba una Alcaldía capaz de recuperar la confianza en las instituciones, y Cuenca la ha dejado huérfana en un momento crucial para la defensa de los derechos de la ciudad, mermando la capacidad del cargo también para exigir la reconexión ferroviaria o el respeto de la capitalidad judicial.

Rocío Díaz, portavoz municipal del PP: "Da una imagen de consenso de cara a la opinión públicaque no es real"

Lo positivo: Ha tenido la habilidad de sobrevivir políticamente en este año sin contar con los concejales de los grupos municipales (Podemos, C's e IU) que le auparon a la Alcaldía. Da una cara de consenso ante la opinión pública que es irreal. No negocia, aunque lo aparente, y gobierna a golpe de decreto. Lo negativo: No ha tomado ninguna decisión y desde que llegó, la ciudad está en una situación de desgobierno. Ha vivido y vive de las rentas, se ha apropiado de logros que se consiguieron durante la etapa del gobierno del PP. Ni él ni su exiguo equipo de gobierno han sido capaces de presentarnos un presupuesto y encima pretenden que se lo hagamos los demás. No cumple su programa electoral, si es que éste existe. Ha sido muy beligerante con la administración central en asuntos como el AVE, cuya obra no ha acabado por un problema técnico, pero se ha plegado ante sus siglas y sus jefes de Sevilla en problemas como el Metro o la reordenación hospitalaria. No se le vio en ninguna de las multitudinarias manifestaciones que exigieron que la Junta diera marcha atrás. Nota: 0,5

Paco Puentedura, portavoz de Izquierda Unida: "Este alcalde no llega al aprobado, necesita hacerse menos fotos y trabajar mucho más"

Ha faltado un cambio de políticas. Aún quedan pendientes medidas para la regeneración democrática especialmente en el área de Urbanismo o una auditoría necesaria en la economía municipal que adopte medidas que garanticen la suficiencia financiera de los servicios públicos, sin aumentos abusivos, injustos y antiprogresivos de impuestos y tasas municipales. Entre las luces podemos hablar de un alcalde que dialoga más y es más cercano ante la ciudadanía y los grupos municipales. También la medida de retomar la cultura en las calles, la apuesta por Granada ciudad de la Música o del Rock. En el área de Derechos Sociales se ha retomado la participación de los colectivos y organizaciones, especialmente con la recuperación de los consejos municipales. Como aspectos negativos, la imposibilidad de este equipo de gobierno de presentar un presupuesto y un plan de saneamiento. La subida en las tarifas del transporte urbano sin mejorar la calidad; que no haya reestructuración en el área de urbanismo, tocada por las distintas investigaciones; o que el alcalde se escondiese en la movilización sanitaria, o se calle con el Metro. Nota: 4,5

Este alcalde no llega al aprobado, necesita mejorar mucho más, hacerse menos fotos y trabajar más. Le pongo un 4,5 pero a pesar de todo, es mejor que Pepe Torres.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios