No sólo los promotores y los constructores están rezando para que finalice de una vez por todas el parón inmobiliario. Electricistas, albañiles, fontaneros y marmolistas autónomos también se han visto duramente golpeados por la crisis de la construcción. Según la información recogida por la Seguridad Social, desde enero de 2009 el 'ladrillo' ha acabado con 1.597 empleos de trabajadores autónomos. En julio de 2010, el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos de la Seguridad Social contaba con 7.329 afiliados, mientras que en el mes de enero de 2009 esta cifra alcanzaba los 8.926. Así que en el último año y medio el estallido de la burbuja inmobiliaria se ha llevado por delante un prácticamente el 18% del empleo autónomo del sector de la construcción.

Dicho así puede no ser un dato alarmante. Pero basta con compararlo con el comportamiento que ha registrado el resto de los sectores para comprobar hasta qué punto los autónomos de la construcción se han visto perjudicados por la crisis. En la actualidad, en todo el régimen de trabajadores autónomos hay 56.801 granadinos afiliados. En enero de 2009, 59.110. En el último año y medio de crisis han desaparecido 2.309 empleos de trabajadores autónomos de todos los sectores de actividad, lo que significa que la construcción ha sido responsable de la pérdida del 69,2% de los puestos de autónomos desaparecidos.

Pese a todo, Granada no es la provincia más afectada por la eliminación de puestos de trabajo de autónomos. Almería y Huelva la superan. Según los datos de la Seguridad Social, en Almería ha desaparecido el 26,6% del trabajo autónomo de la construcción, al pasar de 6.953 afiliados a sólo 5.106 autónomos activos en el sector. En Huelva, por su parte, la crisis ha acabado con el 18,1% del empleo autónomo del sector, registrando el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos de la Seguridad Social tan solo 3.273 afiliados, frente a los 3.997 de enero de 2009. Por detrás de Granada se encuentran Málaga, donde la crisis se ha 'comido' el 17,5% del trabajo autónomo en la construcción; Cádiz, donde los afiliados se han reducido un 17,1% en el último año y medio; Sevilla, con un 13,5% menos; Córdoba, con un 10,8% menos de empleo autónomo; y Jaén, donde los trabajadores autónomos de la construcción se han reducido un 6,9%.

Aunque no sólo los empleos relacionados con la actividad constructora han sufrido en el último año y medio. De hecho, son pocos los sectores de importancia en la provincia de Granada donde los trabajadores autónomos han conseguido nuevos puestos de trabajo. El más destacable es la hostelería, donde al cierre de julio había 6.755 trabajadores autónomos afiliados, lo que supone un incremento del 4,8% respecto a enero de 2009, cuando los afiliados no superaban los 6.442.

En el resto de las actividades con un nivel alto de afiliados al Régimen de Trabajadores Autónomos, la evolución no ha sido tan positiva, aunque tampoco tan desastrosa como la experimentada por el sector de la construcción. En la actividades inmobiliarias, por ejemplo, se ha pasado en un año de 586 afiliados a 539, lo que implica la destrucción del 8% del empleo autónomo del sector. Mientras, en la agricultura el empleo autónomo ha disminuido un 6,3%, al pasar de los 4.864 afiliados en enero de 2009 a los 4.556 de julio.

En el caso de las industrias manufactureras, el empleo autónomo se ha reducido un 5,2%; en la comercialización y reparación de vehículos, un 2,1%; en el sector de los transportes; el almacenamiento, un 4,2%; y en las actividades administrativas y servicios auxiliares, el empleo autónomo ha caído un 8,6% en el último año y medio.