Granada

La declaración BIC no entorpecerá la llegada del legado de Lorca

  • El expediente impulsado por la Comunidad de Madrid (PP) acumula cerca de dos años de tramitación

El legado llegará al Centro Lorca el próximo mes de junio.

El legado llegará al Centro Lorca el próximo mes de junio. / g. h.

La Comunidad de Madrid publicó el pasado 21 de abril la resolución por la que iniciaron los trámites para declarar el legado de Federico García Lorca como Bien de Interés Cultural (BIC). Camino de los dos años desde que se incoara el expediente, los documentos del poeta pondrán rumbo a Granada el próximo mes de junio y, de momento, sigue sin llegar la declaración formal de BIC. Según fuentes de la Fundación Lorca, que custodia en la actualidad los más de 5.000 documentos en la Residencia de Estudiantes de Madrid, esta situación no afectará al traslado del legado.

Y aunque la declaración formal se tenía que adoptar en el plazo máximo de nueve meses a partir de la fecha de publicación del expediente en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, desde la Fundación se insiste en que no habrá problema para hacer efectivo el acuerdo al que se llegó el pasado 20 de diciembre para que el Centro Lorca se convierta, por fin, en la casa del poeta de Fuente Vaqueros. En el caso de que finalmente se declare BIC el legado lorquiano en los próximos meses, la Fundación tendrá que comunicar el traslado de los fondos a la Comunidad de Madrid. "No tiene que haber ningún problema porque la protección se refiere a la imposibilidad de sacar los fondos del territorio español", apuntan desde la Fundación toda vez que, desde que se publicó la incoación del expediente, los fondos ya tienen protección como BIC. "Lo normal sería que cuando el legado ya esté en Granada la Junta inicie los trámites para incoar un expediente nuevo para hacerlo BIC en Andalucía y anular el de Madrid, una negociación normal entre comunidades", apuntan fuentes de la institución que preside Laura García-Lorca.

En caso de que llegue junio y el legado siga en la misma situación administrativa, la Junta tendría que pedir a la Comunidad de Madrid "subsumirse" al expediente para completarlo desde Andalucía. "Pero no habrá problemas para el traslado de los fondos en ningún caso", continúan desde la Fundación, que en todo caso señalan que el expediente no se ha quedado estos dos años en un cajón y que técnicos de la Comunidad de Madrid estuvieron el pasado verano en la Residencia de Estudiantes para seguir completando el informe.

La decisión de declarar como Bien de Interés Cultural el legado levantó una polvareda mediática por una decisión auspiciada por el Ministerio al considerar la necesidad de elevar su nivel de protección, a la vista de que el archivo, que se guarda en la Residencia de Estudiantes de Madrid, es del máximo interés al pertenecer a uno de los máximos exponentes de la cultura española. La iniciativa surgió en un momento en el que corrió el rumor de que el legado podría venderse y se habló incluso del interés de la Universidad de Austin (EEUU), que ya cuenta con el fondo documental del Nobel de Literatura Gabriel García Márquez. Sin embargo, Laura García-Lorca subrayó en su momento que la Fundación nunca pensó en vender el legado fuera del país y acusó al Ministerio de Cultura de tomar esta decisión a espaldas de la Fundación en un momento de máxima tensión, cuando el Ayuntamiento -gobernado entonces por el PP- había cortado todos los lazos con la institución que preside Laura García-Lorca para la llegada del legado lorquiano a Granada.

De hecho, el exalcalde de Granada, José Torres Hurtado, abogó en ese momento por "depurar responsabilidades jurídicas" sobre la gestión del Centro Lorca y de la Fundación del poeta y anunció que una vez se declare BIC el legado, se podría avanzar en un acuerdo entre los gobiernos madrileño y andaluz para que se deposite en Granada.

Dos años después, el legado ya tiene fecha para que sea depositado en la caja fuerte del Centro Lorca y desde la Fundación Lorca se apuesta porque sea la Junta la que culmine el trámite para que los documentos del autor de Yerma sean declarados como BIC en Andalucía. Cuando lleguen los documentos se abrirá un periodo máximo de tres años para la constitución de una fundación pública andaluza que asumirá su titularidad y, según los cálculos de la Fundación, ya estará bajo la protección de la Junta como BIC.

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