Granada

El lugar más ruidoso de Granada está a las afueras

  • La carretera de Pinos Puente, en La Chana, es el punto donde se registraron las mediciones más altas de decibelios en el estudio realizado por la Universidad.

Preguntados por cuál era el punto más ruidoso de la ciudad, probablemente la mayoría de los ciudadanos habría mirado hacia el centro. Sin embargo, el mapa del ruido elaborado por un grupo de investigadores de la Universidad registró las mediciones más altas en la carretera de Pinos Puente, donde durante el día se llegan a soportar 79,4 decibelios, debido fundamentalmente al continuo goteo de vehículos que soporta esta vía, que se suman a los que pasan por la Carretera de Málaga, a tan sólo unos pasos.

“Aquí viene alguien que no está acostumbrado y no puede dormir”, cuenta Francisco Izquierdo, el dueño de la Venta del Grillo, situada justo en este punto. “Desde las cinco de la mañana hasta las tres de la tarde no paran de pasar los coches y a partir de las cinco o las seis de la tarde empieza otra vez el follón, aunque desde las diez de la noche ya está más tranquilo”, explica Izquierdo. “Lo que más molesta son los camiones. A veces estoy sentado viendo la tele y tiemblan las paredes. Pero yo ya estoy acostumbrado y a mí me da igual”, se resigna.

“Aquí dentro no se nota, porque los cristales son gordos”, cuenta una de las trabajadoras de un concesionario situado enfrente, Paqui Jiménez. “Ruido como para que no se pueda soportar no hay, aunque si sales fuera sí es verdad que están todo el rato pasando coches. Sobre todo los días de entre semana, es horroroso el tráfico que hay. De todos modos, yo creía que sería otra calle de Granada la más ruidosa...”, se extraña.

Que bata el récord no significa que algunas calles del centro se le queden muy lejos. De hecho, Reyes Católicos alcanza los 78,4 decibelios de día. Entre los vecinos que lo sufren, se oyen desde luego quejas, aunque con bastantes dosis de resignación. “Si tienes la ventana abierta no se puede oír la tele”, cuenta Alicia Cuevas, que vive en Reyes Católicos. “En mi cuarto tengo doble cristalera y aún así se oye ruido. Yo me duermo porque tengo mucho sueño y porque ya estoy acostumbrada, pero alguien que tenga el sueño frágil, no puede. De hecho, a veces me despierto por la noche, pero me vuelvo a dormir”, relata. “No me molesta tanto el tráfico porque es siempre el mismo ruido y te acabas acostumbrando. Molesta más la gente que grita o canta por la noche, o cuando pasa un coche pitando o con música alta. Desde luego, si vives aquí, tienes que tener buenas cristaleras, si no, estás perdido”, concluye.

Coincide en esta convicción con otro vecino de la calle, Miguel López:“El ruido molesta siempre. Lo que pasa es que tenemos las habitaciones muy aisladas del sonido. Lo que se oye más son las sirenas. Y los autobuses son fatales, también”. “Autobuses, taxis y motos son los que más pasan por aquí”, apunta Juan Bedia, que trabaja en una joyería de esta misma calle. “Y muchas ambulancias, que es lo que más molesta, porque es un ruido muy fuerte”, protesta Bedia, que aun así, asegura que a él personalmente no le supone un estorbo el ruido.

Reyes Católicos es la calle más ruidosa del distrito centro y, como tal aparece en el mapa del ruido coloreada de morado, que indica los lugares en los que se superan los 75 decibelios. Manchadas de ese color están también otras vías en los distintos barrios de la ciudad, como el Camino de Ronda, la avenida de la Constitución, la avenida de Andalucía, la plaza Salvador, la avenida del Sur, la Acera del Darro, la Gran Vía, la avenida de Fuentenueva, Ronda de Panaderos y el camino de Alfacar. Estos son los puntos en los que se alcanzan niveles de ruido más preocupantes.

El análisis que ha hecho sobre los datos del estudio Granada contra el ruido concluye que un 80 por ciento de los granadinos soporta por la noche ruidos que superan los límites establecidos por la legislación andaluza, “que coinciden con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud”, señala el presidente de la asociación, Francisco Morales, quien cifra en el 70 por ciento los ciudadanos que tienen que soportar más ruido del recomendado durante el día (no porque durante el día sea menor el ruido, sino porque los límites por la noche son más estrictos, para facilitar el sueño de la población, fundamentalmente).

Si bien el Ayuntamiento no ha sacado conclusiones tan pesimistas, y establece que los granadinos soportan un nivel “tolerable” de ruido, con una media de 61,8 decibelios, sí es cierto que consideran el mapa de ruidos un documento esencial para comenzar a trabajar. Y  lo que sí está claro es que queda trabajo por delante para hacer de Granada una ciudad más tranquila.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios