Hace no demasiado tiempo, muchos granadinos tomaron una decisión trascendental. Vecinos de pueblos alejados de la capital -o quizás no tanto, pero con carreteras infernales para llegar- le echaron el ojo a una vivienda en lo que se ha dado en llamar el Cinturón Metropolitano. Las ventajas eran evidentes: se seguía viviendo en un pueblo pero a diez minutos de hospitales, delegaciones de la Junta y servicios públicos en general. Esa situación provocó que en muchos de esos pueblos se diera la fiebre del adosado, que proliferaron como setas, y que prácticamente dejasen de ser núcleos reducidos de población a ser de tamaño medio o incluso a superar los 20.000 habitantes. Véase Armilla como ejemplo. A la llamada de esas casas pared con pared y torreón, se desató otro fenómeno, el de los capitalinos que prefirieron mudarse a ese tipo de viviendas de dos plantas y alejarse del trajín de la ciudad. Eso ha traído consigo un hecho estadístico innegociable: el Área Metropolitana es la zona más poblada de la provincia.

Esa realidad, junto a que el principal motor económico de esos municipios durante los últimos cinco años ha sido la proliferación de urbanizaciones -ya sea en horizontal o en vertical- lleva a una segunda conclusión inevitable y casi de perogrullo. Las localidades donde la tasa de paro es más alta están ubicadas en el Cinturón. Empezando, además, por una de las que más incremento de población ha vivido en todo ese periodo de éxodo, Las Gabias. En el municipio gabirro, de un total de 16.369 personas -según las últimas estimaciones de población del Instituto Nacional de Estadística-, el 13,13% está en situación de desempleo. En realidad, el porcentaje debería ser más amplio en este y el resto de los casos, porque el número de parados debería calcularse no sobre el total de la población, sino de la que está en situación de trabajar -mayores de 18 años y menores de 62-, aunque ese dato no está disponible en las bases de datos estadísticas.

El segundo municipio con más paro es Cenes de la Vega, donde el porcentaje de la población en situación de desempleo es del 13,09% de un total de 6.501 vecinos. Y el tercero también está en las cercanías de la capital, Güevéjar, que a pesar de tener un nivel reducido de población, unos 2.400 habitantes, su tasa de paro supera el 12% y llega, concretamente, al 12,3%.

El cuarto municipio granadino con más paro es Churriana de la Vega, en el que de 12.001 personas que residen en él, el 12,28% -concretamente, 1.474- engrosan las listas del club más poblado y con menos requisitos de admisión -sólo hace falta que le echen a uno del trabajo- de España. Y el quinto es su vecino, Armilla, donde sobre una población total de 21.380 habitantes, el 12,03% está en situación de desempleo, unos 2.572 armilleros que engrosan las listas del Instituto Nacional de Empleo, Inem.

En el espectro contrario del fenómeno, los municipios en los que menos vecinos se encuentran en situación de paro, también se da un denominador común. Son localidades de pequeño tamaño, poco pobladas, normalmente ubicadas en entornos rurales. Como por ejemplo Cástaras, donde las tres personas que están contabilizadas en el Inem como desempleadas -una procedente de la construcción, otra del sector servicios y otra sin empleo anterior- suponen un 1,12% de tasa de paro de un total de 268 vecinos. Especial mención hay que hacer aquí a la salvedad que la proporción sobre la que se realiza la tasa es sobre la población total, porque probablemente el resultado variaría teniendo en cuenta el alto nivel de envejecimiento que se suele dar en este tipo de municipios rurales de interior.

Misma situación que se vive en Dehesas de Guadix, con un censo que supera por poco el medio millar de personas. Entre ellas, hay una docena que no tiene trabajo, lo que supone una tasa de desempleo del 2,38%. Algarinejo ocuparía la tercera posición entre los municipios con menos tasa de paro, un 2,56% de un total de 3.706 vecinos -aquí, el número de parados es más alto, casi de un centenar-. Alamedilla, con un 3,05% de paro de un total de 721 vecinos; y Aldeire, con 3,11% de paro, cierran la hipotética clasificación.