Se acerca el momento crucial en el que Adif tendrá que enviar a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria la documentación de la primera fase de las pruebas en la línea de alta velocidad Granada-Antequera. Las pruebas de carga en puentes ferroviarios y viaductos están en la recta final, según confirmó ayer Adif a este periódico para cumplir con las previsiones de que a principios de mayo se culminarían estos trabajos. También se está avanzando en el análisis de los sistemas de señalización y control que guiarán a los trenes comerciales en la velocidad que se fije en cada trayecto, además de la comprobación de los sistemas de comunicación que desde el puesto de mando se deben tener con el maquinista en todo momento, una serie de chips y enclavamientos a lo largo de toda la vía cuya fiabilidad está siendo comprobada. Cuando Adif recopile toda esta documentación la enviará a la Agencia Estatal de Seguridad Ferroviaria para que dé luz verde a una infraestructura que ha costado más de 1.600 millones de euros. La Agencia tendrá un mes para estudiar esta documentación y autorizar las pruebas por parte del Renfe, tanto las de integración tren-ruta, como las de formación de maquinistas. Concluidas estas, se tramitará el expediente de puesta en servicio, siendo la Agencia de Seguridad quien determine su validez y emita la autorización para el comienzo de la explotación comercial, además de aprobar las velocidades que podrán alcanzar en cada tramo los trenes, que el pasado mes de febrero llegaron a alcanzar los 200 kilómetros por hora con un tren laboratorio BT2 en el tramo entre Loja y Antequera.

Este es el estado de las pruebas que presentará el próximo 23 de mayo el secretario general de Infraestructuras, Manuel Niño, en la reunión de la comisión de seguimiento de las obras del AVE que convocó la semana pasada el Ministerio de Fomento. En este momento se siguen ajustando los márgenes para que el AVE pueda llegar a Granada antes de finales de 2018 y uno de los puntos fundamentales para que Adif pueda mandar la documentación a la Agencia de Seguridad Ferroviaria es que concluyan los trabajos en la pasarela peatonal en la estación de San Francisco de Loja, ya que en la actualidad existe un puente provisional que se desmonta cada vez que pasa un tren laboratorio, aunque para esta última fase de comprobaciones la infraestructura tiene que estar terminada porque la frecuencia de paso de los trenes impedirá realizar a diario esta operación.

De forma paralela también está pendiente que concluyan las obras de acondicionamiento en el exterior de la estación de Andaluces y la construcción del aparcamiento en superficie que corresponde a Metro de Granada por los acuerdos alcanzados con Adif en su momento. Aunque se adjudicaron los trabajos y se firmó el contrato, Adif comunicó a principios de 2016 que no estaban disponibles los terrenos porque se estaba haciendo acopio de materiales de las obras del AVE en ellos. La situación de la parcela se ha mantenido igual hasta finales del año pasado, momento en el que el Administrador de Infraestructuras Ferroviarias comunicó la disponibilidad del solar y la Agencia de Obra Pública retomó los contactos con el contratista para dar la orden de inicio de las obras. Sin embargo, al haber transcurrido dos años desde la formalización del contrato, éste precisa de una actualización.