La plantilla de Alhambra Bus presentó ayer formalmente su propuesta para abandonar definitivamente sus intenciones de huelga. Lo hizo ante los grupos políticos y el equipo de gobierno tras la comisión de movilidad, "con el objetivo de que la vean y la estudien", explicó la delegada de personal de Alhambra Bus por CGT, Silvia Leyva.

La empresa, que se encarga del transporte turístico a la Alhambra, comenzó una huelga indefinida el 1 de julio para reclamar la eliminación de la precariedad de algunos compañeros y para exigir que se les haga indefinidos, que se permita la conciliación de la vida familiar y laboral con cuadrantes de trabajo trimestrales y no semanales. Piden además que se elimine la palabra "subcontratación" y que Rober asuma a la plantilla con las mismas condiciones económicas, aunque dejan claro que no quieren entrar en las rotaciones de Rober sino quedarse en sus líneas turísticas. "En estos dos últimos puntos, es donde se enquista la negociación", asegura la delegada de personal de Alhambra Bus por CGT. También piden que la empresa les facilite los desplazamientos para ir a trabajar en busca del bus. "Ponemos nuestros vehículos propios para que los compañeros vuelvan a cocheras, y la empresa se desentiende de ese medio que nosotros empleamos", comentó Leyva.

La decisión de retomar la huelga o desconvocarla estaba fechada para el 18 de julio, sin embargo, se ha aplazado hasta el 28 de julio."El jefe no nos dio la oportunidad ni de sentarnos en la silla,parece que tenemos que aceptar el acuerdo que ellos han hecho sí o sí", lamentó Leyva.

"La empresa dice que es el Ayuntamiento, y el Ayuntamiento comenta que es la empresa la que no quiere aceptar la proposición", manifestó Leyva.