La plantilla del Real Madrid regresó ayer a los entrenamientos en la ciudad deportiva de Valdebebas tras la conquista del primer título de la temporada, la Supercopa de Europa, con la mente puesta ya en el segundo, el que desde el próximo domingo disputa contra el FC Barcelona, la Supercopa de España.

El francés Zinedine Zidane dirigió una sesión en la que el portugués Cristiano Ronaldo trabajó junto a sus compañeros, perfilándose ya titular para la ida de la Supercopa española del domingo en el Camp Nou. Con la presencia de los jugadores del Castilla Luca Zidane y Achraf, el Real Madrid completó un entrenamiento en el que tras las series de calentamiento y los ejercicios de posesión y circulación de balón, según informa la web del club, acabaron con un partido en un campo de dimensiones reducidas.

Después de conquistar la Supercopa de Europa en la ciudad de Skopje (Macedonia) con su victoria en la final ante el Manchester United y regresar de madrugada, los jugadores madridistas tuvieron día de descanso el miércoles y ayer retomaron el trabajo de entrenamiento ya con la mente en el Barcelona.

Para la visita al Camp Nou en el primer capítulo de una final a doble partido, Zidane comenzó a ver los cambios que realizará en su equipo titular. Uno es obligado ante la baja por sanción del croata Luka Modric, que tiene que cumplir un partido por la expulsión sufrida ante el Atlético de Madrid en su última Supercopa. Mateo Kovavic y Dani Ceballos luchan por el puesto del '10' madridista.

El técnico blanco dispone de dos entrenamientos más para terminar de decidir las rotaciones por las que apostará y las zonas del campo donde introduce novedades. La entrada del madrileño Nacho Fernández en defensa más el regreso al once del luso Cristiano Ronaldo apuntan como cambios fijos para la cita.