oviedo | granada cfmontoroH

Vuelta agridulce del motor del equipo

  • Montoro está a buen nivel en ataque pero en defensa sufre y habilita a Steven en la acción del 2-1

Montoro presiona a un jugador del Oviedo, en presencia de Kunde, en el choque de ayer.

Montoro presiona a un jugador del Oviedo, en presencia de Kunde, en el choque de ayer. / agencia lof

Pocos jugadores tienen en el actual Granada tanta jerarquía como Ángel Montoro. El centrocampista ha faltado esta campaña a más encuentros de los que todo el mundo hubiera deseado, pero siempre que ha estado disponible ha sido titular para José Luis Oltra.

Tras varias semanas de baja por una rotura fibrilar, faltó al partido de la pasada semana frente al Nástic porque el técnico entendía que aún no contaba con ritmo competitivo, mas su citación frente al Oviedo casi aseguraba su regreso a la alineación titular. Fue de la partida actuando como medio centro de posición único, ya que Sergio Peña y Kunde jugaron más avanzados formando un triangulo invertido en la medular.

Firmó, en líneas generales, un encuentro correcto. Su presencia dota al Granada de calidad en la medular para jugar la pelota, ya que es el medio con más clase del equipo, aunque en tareas defensivas quizás ofrece menos que otros hombres como Raúl Baena o Alberto Martín.

El valenciano empezó el choque algo dubitativo, con varias pérdidas de balón absurdas y cometiendo un par de faltas. De hecho, acabó el primer tiempo con cuatro infracciones realizadas y en la segunda parte cometió alguna más. Por eso, el colegiado le mostró una tarjeta amarilla en el minuto 60. El propio Arcediano Monescillo explicó al jugador al amonestarlo que la cartulina era por reiteración.

El principal lunar en su regreso a los terrenos de juego fue habilitar a Steven en la jugada del 2-1. Parecía que el joven atacante de los ovetenses estaba en fuera de juego pero Montoro se quedó ligeramente colgado convirtiendo en correcta su posición y en válido el gol.

Evitó dar pelotazos y prácticamente hasta el último momento trató de llevar las riendas ofensivas de los suyos a base de pases cortos, aunque su influencia en el juego rojiblanco decreció con el paso de los minutos.

En la vuelta al equipo de Montoro el Granada sumó su tercera derrota consecutiva. En la mano de muchos está revertir esta mala de resultados, y el centrocampista levantino es de los que más puede y más tiene que aportar para que se produzca el retorno a la buena senda.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios