El viceprimer ministro británico y líder liberaldemócrata, Nick Clegg, se ha disculpado por romper su promesa electoral de 2010 de que no apoyaría un incremento de las matrículas universitarias en el Reino Unido, con gran desprestigio para su partido.

En un vídeo que se emitirá el lunes -al inicio del congreso anual de la formación-, pero cuyo contenido se adelantó ayer, Clegg lamenta haber hecho esa promesa "sin evaluar si podía cumplirse".

El Partido Liberal Demócrata, socio minoritario en el Gobierno de coalición con los conservadores, ganó muchos votos en las elecciones de mayo de 2010 con la promesa de que no votaría en el Parlamento a favor de encarecer el acceso a la educación superior, algo que posteriormente hizo al respaldar una medida de los tories.

Ese apoyo fue visto como una traición por parte de los votantes y militantes liberales, y provocó una caída de popularidad del partido y su líder de la que aún no se han recuperado.

Dos años y medio después, Clegg se disculpa, pero no por haber apoyado el aumento de las matrículas, sino por haber hecho una promesa que no pudo cumplir.

"Hicimos una promesa antes de las elecciones de que no votaríamos por un aumento de las tasas bajo ninguna circunstancia. Pero eso fue un error. Lo hicimos con la mejor de las intenciones, pero no deberíamos haber prometido algo que no estábamos absolutamente seguros de que podríamos cumplir", afirma en la grabación.

Clegg añade que se equivocó al comprometerse con una medida que iba a salir cara en un momento en el que no hay dinero, y sabiendo además que, si llegaba al Gobierno, sería en un Gobierno de coalición. "No hay una manera fácil de decir esto: hicimos una promesa, no la cumplimos, y por eso, me disculpo", asevera en el vídeo, en el que aparece con camisa azul y sin corbata.

El viceprimer ministro, cuya popularidad cae del 31 al 23% en las últimas encuestas, insiste en que ese fallo puntual no debe ensombrecer los logros de los liberales en el Ejecutivo.

La disculpa de Clegg se produce en un momento en que su partido empieza a cuestionar su liderazgo y cada vez más voces piden que sea sustituido por el actual ministro de Empresa, Vince Cable, al que se percibe como más a la izquierda.

El vídeo, de 2,5 minutos de duración, se emitirá el próximo lunes como propaganda política.