El referéndum celebrado el domingo y ayer en Italia para derogar parte de la ley electoral ha fracasado al no alcanzarse el quórum de la mitad más uno del censo necesario para que la consulta sea considerada válida, según datos provisionales del Ministerio del Interior.

A la espera de conocer los datos definitivos de participación, los provisionales facilitados por el ministerio situaban la afluencia a las urnas en el 23,4%, muy lejos del mínimo necesario para que el referéndum sea válido, el 50% más uno del electorado.

Este resultado supone, en buena medida, un triunfo para la Liga Norte (LN), el partido aliado del primer ministro, Silvio Berlusconi, contrario al referéndum, así como del opositor Italia de los Valores (IDV), del ex magistrado Antonio Di Pietro.

El Pueblo de la Libertad (PdL), de Berlusconi, estaba a favor, aunque no hizo campaña presionado por la Liga Norte, mientras el Partido Demócrata (PD), principal de la oposición, había pedido el sí.

El presidente de la Cámara de Diputados y dirigente de PdL, Giafranco Fini, uno de los defensores del sí, afirmó tras conocer el resultado que éste, visto el desinterés de los ciudadanos y la ausencia de campaña electoral, era "bastante previsible" y debe hacer reflexionar a los políticos.

Unos 51,1 millones de italianos habían sido convocados a las urnas para que manifestaran su rechazo o apoyo a la atribución del "premio de mayoría" a la lista más votada en la Cámara de Diputados y el Senado y a que un candidato pueda presentarse a la vez en varias circunscripciones del país.

La actual ley garantiza "a la lista o coalición de listas" más votada la mayoría absoluta.

Si hubiera ganado el sí, en las dos cámaras el "premio de mayoría" no sería ya asignado a la lista o coalición de listas más votada, sino sólo al partido con más sufragios, y un candidato únicamente podría presentarse en un colegio, no como hasta ahora que podía hacerlo en todos y, una vez celebrados los comicios, decidía con cuál quedarse.

Los partidarios del sí mantienen que el cambio garantiza la gobernabilidad del país, ya que el partido más votado no tendrá que echar mano de otros para gobernar y puede desarrollar completamente su programa, evitando así ser "chantajeado" por eventuales aliados, de ahí el apoyo del PdL y del PD.

Mientras tanto, la Fiscalía de Bari está investigando otras cuatro fiestas celebradas en las residencias de Berlusconi y a las que habrían acudido numerosas chicas jóvenes a cambio de dinero, según reveló ayer el diario italiano La Repubblica.