El Gobierno de Barack Obama notificará al Congreso de sus planes de incluir aviones de última generación en una oferta de armamento por 46.000 millones de euros a Arabia Saudí, indicaron fuentes del Departamento de Defensa.

Los funcionarios, que hablaron bajo condición de anonimato porque la transacción aún no fue anunciada oficialmente, confirmaron un informe del Wall Street Journal sobre el acuerdo, pero advirtieron que la iniciativa podría ser bloqueada por legisladores clave en el Congreso.

"Se puede esperar que por el momento quede en suspenso el acuerdo", que se estima sería la mayor venta de armamento de ese tipo para Estados Unidos, indicó una destacada fuente del Congreso.

"Existe una seria preocupación por algún material sensible que se espera se incluya en el acuerdo", cuyos alcances serán explicados a los congresistas por los asesores de Obama.

El diario estadounidense, que cita como fuente a funcionarios que no identifica, asegura en un artículo que la administración de Obama mantiene además conversaciones con el reino árabe en torno a "actualizaciones de su equipamiento naval y su defensa frente a misiles" que podrían valer "decenas de miles de millones más".

El Gobierno norteamericano, que enviará el acuerdo al Congreso "esta semana o la próxima", planea presentar el plan como un "medio de creación de empleo" en Estados Unidos, y como parte de su "política de apoyo" a sus aliados contra Irán, según el rotativo.

El acuerdo inicial prevé la venta de 84 nuevos aviones de combate F-15, la actualización de otras 70 de estas aeronaves y la oferta de tres tipos de helicópteros: 70 apaches, 72 black hawks y 36 little birds.

En un principio, no obstante, las autoridades saudíes sólo se comprometerán a adquirir "alrededor de la mitad" de los aviones.

El diario añade que también se contempla modernizar las fuerzas navales saudíes.