Cansado, "muy cansado" por culpa de un viaje desde Los Ángeles a Málaga con escala en Nueva York, pero con una ilusión que "sobrepasa el cansancio" y "encantado de estar en Granada, encantado de ser andaluz y encantado de colaborar con una compañía como Kandor Moon". Totalmente volcado en un proyecto que se nota que le apasiona hasta la médula, Antonio Banderas quiso cumplir con su palabra y ser él mismo quien acompañase ayer a la consejera de Cultura y al consejero de Innovación, Ciencia y Empresa de la Junta de Andalucía en su visita a las instalaciones de la sede de los estudios Kandor Graphics, desde donde se ha hecho posible el sueño de llevar a Granada hasta los Oscar.

"La dama y la muerte cuenta con posibilidades reales de hacerse con el Oscar al Mejor Cortometraje de Animación. Creemos mucho en el producto que hemos sacado desde aquí y que puede competir allí, y también hemos hecho una campaña en Estados Unidos para invitar a votar a la gente por este corto en la que he utilizado a mi esposa, a mi suegra y a todos mis amigos", contó divertido el actor y productor malagueño, que cree que Kandor Moon es una apuesta segura de futuro.

Los ochenta profesionales que trabajan en los estudios de animación que dirige Manuel Sicilia están, según Banderas, en un nivel que nada tiene que envidiarle a la todopoderosa industria norteamericana: "Nuestra compañía no es sólo un grupo de artistas más o menos locos que hacen dibujos y que empiezan a tener ciertos reconocimientos. Nosotros hacemos nuestros trabajos con el dinero que empresas como DreamWorks destinan sólo a la publicidad de sus películas y, sin embargo, nuestra intención es poder competir en los mismos terrenos que ellas. Lo que para mucha gente podría considerarse una utopía es una realidad con un futuro increíble para nosotros. Sabemos que acabamos de nacer en esto, pero creemos que nos podemos convertir, sin ningún tipo de reparo, en el Pixar europeo".

Para dar muestra de ello, el actor y productor malagueño quiso recorrer junto a Rosa Torres y Martín Soler "todo el proceso que hay detrás de una película de animación" y, junto a los dibujantes, modeladores, productores, programadores y demás responsables de las distintas áreas, fueron testigos en primera persona de todo lo fascinante que está por venir de la mano de Goleor, la balanza y la espada, la primera película de animación en 3D estereoscópico que ya preparan.

"Aún se está escribiendo en Los Ángeles el guión y todavía hace falta alguna última reunión con Manolo [Sicilia] para darle el visto bueno final, pero todo el trabajo de estudio de los personajes, de su movilidad y de su personalidad, se lleva haciendo desde hace tiempo", explicó Banderas, que asistió en primicia al visionado de los primeros trabajos de recreación de la Alhambra de finales del siglo XV que se están haciendo para la película Boabdil.

"No sólo me ha encantado, me ha emocionado. Me ha emocionado ver, aunque sea en un plano muy corto todavía, la Granada de hace 500 años. Cuando uno escribe un guión y tiene una idea sobre algo sueña con verlo en pantalla, pero tanto el plano de la Alhambra con la Granada de la época de fondo como los planos interiores que se han ido haciendo son espectaculares. Todavía hay que hacer muchos estudios, Boabdil es un proyecto muy complejo que requiere un gran presupuesto y una gran responsabilidad, ya que hay que ser justo con la historia y, al mismo tiempo, desarrollar la película de una manera dramática que sea interesante y atractiva para el espectador", avanzó Banderas, que espera poder tener "en dos o tres años" su Boabdil.

Por el momento, lo que sí es ya inminente es la posibilidad de que Javier Recio se traiga a Granada el Oscar. El 7 de marzo el Teatro Kodak de Los Ángeles será testigo del acontecimiento y, desde allí, Antonio Banderas seguirá con su apoyo incondicional".