Actual

'Business class' para Gael García Bernal

  • El Festival Cines del Sur, que arranca esta tarde su segunda edición en el Palacio de Carlos V, no pretende ser Cannes, pero su organización conlleva un gran despliegue técnico y de personal

¿Viajan todos los invitados en primera clase? ¿Cómo se las arreglan para comer en Granada? Organizar Cines del Sur no es sólo darse el 'atracón' de películas. También es no dejar un detalle suelto y coordinar la estancia en la ciudad de las más de cien personas que acuden de países como Sudáfrica o Kazajstán.

Primer 'mito' a desterrar: la gran mayoría de los invitados viajan en clase turista. Aunque hay excepciones, como Gael García Bernal, que viene, obviamente, en business class. "Pero la mayoría son gente que hace cine en condiciones muy difíciles, en países del Tercer Mundo", explica Enrique Novi, uno de los encargados de que a los invitados 'no les falte de nada'.

Durante estos días, su vida será un ir y venir del aeropuerto, con los cineastas llegando al mismo tiempo desde países muy diversos, hablando lenguas diferentes. Y cada uno necesita su traductor. Esta labor la suelen hacer voluntarios que acompañan a los responsables de los transfers. "Claro", puntualiza Novi, "hay gente que sólo habla chino mandarín o ruso". Luego está la inexcusable visita a la Alhambra de los invitados. En este caso se facilitan las cosas ya que el Patronato de la Alhambra colabora con el Festival. Ya hay previstas dos visitas exclusivas a lo largo del festival para que puedan hacerse la foto con la Alhambra al fondo.

También hay invitados que se sienten más seguros si tienen a alguien de la organización permanentemente con ellos y otros, más independientes, que prefieren ir por libre. Un caso especial es el de un actor malayo de una minoría de origen china. Es el protagonista de una de las películas de la sección oficial, y se da el caso de que sólo tiene 9 años. "Para que el chaval pueda venir hemos necesitado la autorización del tutor y, además de los problemas de visado y la logística de organizarle el viaje, es un país del que no es fácil salir, por lo que hubo que ponerse en contacto con la embajada de Malasia", recuerda azorado Novi. Es el mismo caso de actores y directores que vienen de China, Kazajstán o Tajikistan, "gente que necesita mucha documentación para venir". Otro director debe salir de Beirut, y con lo complicada que está ahora la situación en Oriente Medio, "hasta última hora no confirmará su presencia".

Otro caso especial es el de la actriz de Sudáfrica Nabeweya Scello, que protagoniza Confessions of a Gambler dentro de la Sección Oficial. La actriz de color ha necesitado sacarse incluso un seguro médico en Sudáfrica, "aparte de enviar nosotros un montón de cartas a la embajada". Son los avatares para conseguir los visados. "Todavía estamos pendientes de que se consiga el visado para el director chino Zi jian", explica Novi.

La organización proporciona a los invitados desde el vuelo, hotel y dietas para comer, "todo lo que quieran pero dentro de un orden". Para ello han firmado un convenio con unos quince restaurantes de la ciudad, desde japoneses, hindús, italianos, comida tradicional española, vegetarianos... A cada invitado le proporcionan un ticket que es válido en estos restaurantes, eso sí, con un valor límite para que coman bien. Pero sin excentricidades. Incluso Gael García Bernal contará con el mismo ticket de comida que el más humilde de los actores.

Las cintas que se proyectan en el Cines del Sur son de formato 35mm y la organización cuenta con una persona dedicada en exclusiva al "tráfico de películas". Los títulos de reciente producción tienen un número limitado de copias, y estas tienen un periplo muy peculiar. "Aquí nos puede llegar una película que viene de Berlín y su próximo destino puede ser un festival de Latinoamérica."

Claro, estos avatares "hay que tenerlos en cuenta" a la hora de programar. "Si hay una película que cumple los requisitos, los productores quieren acudir y los distribuidores llegan a un acuerdo económico con la organización, si no hay una copia disponible porque están en otros sitios no se pueden incluir en la Sección Oficial".

En total se han recepcionado más de setenta películas. Incluso disponen de una furgoneta destinada en exclusiva al traslado de los rollos en 35mm "que pesan un quintal". "Todas las películas se proyectan un par de veces en diferentes auditorios y hay un trasiego constante de rollos de películas", explica Novi. Además, cada película tiene hecho un seguro, porque es un material "muy caro". A los 'currantes' del Cines del Sur se les amontona el trabajo.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios