Su color favorito... el rosa; su canción... Barbie girl; y su pasatiempo preferido... asesinar a sus compañeros de universidad. Se llama Bárbara y está interpretada por la actriz Macarena Gómez (Córdoba, 1978), que se estrena en Sexykiller como protagonista. Las salas de todo el país exhiben desde hace una semana la imagen de esta despótica y pija asesina en serie cuya historia que se ha colado en los primeros puestos del ranking taquillero: "Soy fan de la película. Ya la he visto ocho veces, e incluso he pagado mi entrada en el cine", reconoce.

-¿Será el papel de Bárbara un antes y un después en su carrera?

-No lo sé, eso espero. Bárbara me ha ayudado a que la gente de la industria me conozca mejor y confíe en mí. Era un reto muy difícil porque tenía que defender hora y media de metraje sin llegar a aburrir.

-¿Qué reacciones se han suscitado desde el estreno de la película?

-Todas las respuestas han sido buenísimas. A la gente le está divirtiendo la historia, que era el objetivo del director, hacer pasar un buen rato. Además, la gente habla de ella y la conoce, y eso es muy bueno.

-¿Algún sector del público se escandalizará?

-No está recomendada para menores de 18 años, pero aunque hay sangre, los chicos más jóvenes están acostumbrados a ver contenidos en la tele y en los videojuegos con más carga de violencia. Es cierto que hay escenas sangrientas, pero no son desagradables.

-¿Cómo se trata la violencia?

-Con mucho humor. Se podría pensar que es una apología de la violencia porque mi personaje se dedica a matar a compañeros de la universidad, algo que en muchos países está a la orden del día. Pero no creo que incite a la violencia, trata el tema de los asesinatos y la venganza con sentido del humor.

-¿Su frívolo personaje le ha traído algún quebradero de cabeza?

-Mi temor era que después de interpretar a una asesina durante toda la cinta cayera antipática a la gente. Por eso intenté que el público empatizara al máximo con mi personaje. Bárbara habla mucho a cámara para seducir al espectador. Casi todos los que la han visto aseguran que les cae muy bien y que no les importaría ser sus amigos.

-¿Le ha costado hacer de mala?

-No, porque la parte irónica y sarcástica que tiene el personaje es muy de Macarena, muy mía. Había algunas secuencias que no estaban escritas para ser tan divertidas pero yo les puse humor de mi propia cosecha.

-¿Y cómo se familiarizó con las catanas y las pistolas?

-Me encantó la experiencia. Cuando manejas un arma en una película en parte estás bailando, haciendo una coreografía y eso a mí me resulta muy fácil por mi formación como bailarina. Estuve un tiempo practicando con un entrenador de armas y me resultó muy fácil.

-¿Cómo ha sido trabajar con Miguel Martí?

-Un placer porque, en primer lugar es muy amigo mío, pero además es un director que sabe escuchar. Me daba libertad para aportar cosas al personaje y esto hacía que me sintiera muy cómoda. Lo mismo ha pasado con mis compañeros, con la mayoría ya había trabajado y lo más importante es que nos hemos divertido muchísimo en el rodaje y eso se refleja en la película.

-¿Cuáles son sus próximos proyectos?

-A comienzos de 2009 voy a rodar una película que se llama Carne de neón, de Paco Cabezas, el guionista de Sexykiller. Este proyecto se materializó hace tres años en un corto que ahora han decidido llevarlos al largo. La película es como una tragicomedia que trata gente de los bajos fondos que tienen que abrir un puticlub para que la protagonista, que será Victoria Abril, que acaba de salir de la cárcel se encuentre con la vida solucionada.