Todo comenzó entre fogones. Peter Florence, además de actor, es la persona que fundó y ha dirigido hasta ahora los cinco Hay Festival que se celebran en el mundo. A partir de hoy, Granada se suma a la convocatoria del gran encuentro literario y artístico con una programación que mira a Oriente y Occidente y que reunirá en el Palacio de la Alhambra a importantes figuras de la cultura global. El Hay Festival Alhambra se celebra en Granada por primera vez y arranca hoy su programa oficial con un homenaje a Francisco Ayala.

-¿Es cierto que todo empezó con una partida de póquer? Cuenta Richard Booth que una noche de agosto de 1987 usted tuvo buena racha y ganó mucho dinero. ¿Así comenzó el proyecto?

-Es una buena historia, y como todas tiene parte de verdad. Todo empezó alrededor de la mesa de la cocina de mi madre donde charlábamos y contábamos historias.

-Su padre fue director de la compañía de teatro The Globe. ¿Cómo le ayudó su experiencia en este ámbito a la hora de concebir un proyecto de este tipo? ¿Qué ha aprendido de su padre?

-Él sabía cómo transformar algo en una maravilla y crear mundos inmersos en la fantasía circense. Mi padre me enseñó a valorar la enorme suerte que tengo de poder trabajar en lo que me gusta y con lo que disfruto.

-¿El festival conserva el espíritu de aquella modesta primera edición? Entonces era un pequeño encuentro de literatura con apenas 15 eventos…

-Prácticamente no ha cambiado. Sigue siendo lo mismo sólo que con una mayor mesa de cocina y la ilusión de poder trabajar en el mundo hispanohablante. Es una continua aventura.

-¿Qué ha cambiado?

-Al convertirse en un festival internacional hemos adquirido mayor fuerza. Es maravilloso poder explorar otras culturas y, en concreto, la literatura española y árabe.

-Ha contado en alguna ocasión que, cuando llamó a Arthur Miller para invitarle a la edición de 1989, el dramaturgo estadounidense le respondió: "¿Hay-on-Wye? ¿Es eso algún tipo de sándwich?". Hoy esa frase adorna las camisetas del vigésimo aniversario del festival. ¿Hay alguien que se le haya resistido en alguna ocasión?

-Pues, precisamente, cuando nos dimos cuenta de que Gabriel García Márquez no vendría a Gales... Y fue entonces cuando decidimos llevar el Festival a Cartagena de Indias...

-¿Cuáles son sus deseos para el Festival de Granada?

-Espero que los granadinos disfruten. Mi mayor ilusión es que formen parte del propio festival. Granada es mágica porque cuenta con un gran símbolo cultural como es la Alhambra. Además, es una ciudad muy importante para el siglo XXI, ya que concentra en un mismo territorio dos culturas, la árabe y la occidental.

-¿Cómo definiría al público del Hay Festival?

-Es completamente abierto. Nos dirigimos a cualquier persona a la que le guste las historias y las nuevas ideas.

-¿Cómo se construye la programación de cada edición?

-Primero pienso en quien más admiro y con quien me gustaría compartir un almuerzo... Y entonces me dirijo a ellos y les pregunto si quieren participar. Tan sencillo como eso.

-El modelo del Hay Festival es totalmente distinto a otros certámenes literarios. En este caso, la prioridad son los escritores, los artistas, como 'estrellas' de los acontecimientos. ¿Cuál es el secreto para que la fórmula funcione?

-A nosotros nos funciona. Los novelistas y escritores son unos grandes conversadores, saben como comunicarse ante el público. Por eso me gustan. Ellos mejor que nadie saben reinterpretar el mundo en el que vivimos.

-Con este tipo de propuestas, el festival constituye un caso paradigmático en la internacionalización de marcas culturales. Por su poder de convocatoria se ha convertido en uno de los festivales literarios más importantes del mundo. ¿Gran parte del éxito se basa en su impacto mediático?

-Literatura y periodismo van de la mano. Los medios se ponen 'hay' porque todos utilizamos el mismo lenguaje. De todas formas, lo más importante de todo esto es el público.

-La fama creciente del festival se retroalimenta con la capacidad para atraer a personalidades del mundo de la literatura, el arte, la política... En ediciones anteriores han participado Sting, Bono, George Soros, Norman Mailer, Al Gore, Gordon Brown, Tony Blair... ¿Qué presencias destacaría del encuentro granadino?

-Morente, por supuesto, Joaquín Sabina, Almudena Grandes, Simón Schama, Umberto Eco, Goytisolo, Spassky, Anouar Brahem... Todos son tan buenos profesionales en sus especialidades como el resto.

-Los festivales de Cartagena y Segovia se organizaron con un equipo discreto y un presupuesto relativamente bajo para cubrir costes. Pese a ello, el impacto ha sido enorme. Ahora apuestan por Granada, con una mirada especial al mundo árabe y europeo, y para 2009 ya se piensa en Miami. Los pronósticos son muy positivos...

-El Hay Festival Alhambra contará ya este año con la participación de unas doscientas personas que se desplazarán desde Reino Unido para participar en el encuentro. Para los próximos cuatro años, esperamos ser capaces de 'mover' a unas cinco mil personas procedentes de todo el mundo para asistir a cada edición.

-En España no es habitual tener que pagar para asistir a un encuentro literario. ¿Cómo consiguen llenar el aforo con sus propuestas?

-Creo que el público está acostumbrado a pagar ir al teatro, al cine, a un concierto o cualquier espectáculo de entretenimiento. Lo bueno del gran apoyo que recibimos de las instituciones y los patrocinadores es que todas las entradas se venden al 50 por ciento del precio al que saldrían a la venta en Reino unido. Hasta ahora siempre hemos llenado.

-El Hay Festival es desenfadado y muy abierto. ¿Cómo se logra el apoyo de la empresa privada?

-Las compañías apoyan el festival porque creen en su espíritu y en su esencia. El hecho de que Mapfre se involucre con Segovia y Cartagena es lo que ha hecho que nosotros estemos allí. La asombrosa generosidad por parte de todos los compañeros es lo que hace posible el festival. Somos increíblemente afortunados de tener unos amigos con tan magna imaginación.