Durante todo el viaje a Granada ha venido pensando en los Reyes Católicos, imaginando a Cristóbal Colón pidiéndoles permiso para viajar a América, en la Alhambra, en la conquista de Granada... Ideas que lo han hecho sentir como "si estuviera en una avalancha de nieve de emociones". Joaquín Achúcarro, uno de los grandes, interpreta esta noche la Rapsodia sobre un tema de Paganini de Rachmaninov, una de sus obras más queridas, junto a la Orquesta Sinfónica de RTVE.

-¿Cuándo tocó la 'Rapsodia' por primera vez?

-En Siena, en 1956, junto a Zubin Metha, pero luego la he interpretado muchas más veces a lo largo de los años. Es una obra cumbre del piano, una verdadera maravilla. Y me emociona hacerlo en el Carlos V con la Orquesta Sinfónica de RTVE, a la que tengo tanto cariño y con la que he compartido tanto. Además, hace treinta años que no coincido con Inbal, su actual director, será magnífico trabajar con él de nuevo.

-La primera vez que tocó en el Festival de Granada fue en Los Arrayanes...

-En 1954, un Festival maravilloso donde coincidí con Teresa Berganza. Tocar en Los Arrayanes es mágico, es un espacio que inspira al artista. El miedo escénico a determinados lugares también forma parte de la profesión.

-¿Lo prefiere al Carlos V?

-Eso es como preguntar si prefiero un bombón de chocolate relleno de fresa o de frambuesa. Son dos espacios espectaculares para cualquier intérprete.

-Acaba de volver de Dallas, se marcha ahora a China, su ritmo de conciertos es frenético. ¿Venir a Granada continúa entusiasmándole?

-Como el primer día, el de Granada es el primer Festival de España, luego llegó Santander, me trae recuerdos y emociones fenomenales. Aunque actualmente haya tantos Festivales, el de Granada tiene un gran carisma. Además cada vez que vengo a Granada pienso en Falla, en Federico, en tanta genialidad.

-Le han concedido el Premio Nacional de Música en 1992, la Medalla de Oro a las Bellas Artes, en 2000 la Unesco le nombra artista por la paz, es Comendador de la Orden de Isabel la Católica, entre otros galardones, ¿son importantes los reconocimientos para un artista?

-Siempre animan.

-Precisamente hoy entregará junto al alcalde de la ciudad, la Medalla de Honor de la 64 edición del Festival a la Orquesta Sinfónica de RTVE...

-Muy merecida. He trabajado muchas veces con ellos.

-Usted ha tocado con más de doscientas orquestas.

-Con cada una la experiencia es diferente.

-¿Se queja el piano si lo tratan mal?

-A veces no se sabe si estás delante de un instrumento o con un ser pensante. A estas alturas sigo descubriendo cosas del piano. Suelo clasificarlos en tres categorías, los traidores son los peores porque al principio parece que te están haciendo caso, cuando en realidad mienten.

-En Dallas hace un fantástica labor.

-Me gusta tratar a los alumnos de tú a tú, como a iguales. También yo fui alumno.