Más que la chistera, en su profesión se imponen los designios propios de la moda femenina. Ya sea a bordo de unos tacones de aguja o cómodamente sobre unas bailarinas, Inés triunfa como maga en un mundo tradicionalmente de hombres. "Siempre que dices magia se forma en tu mente la imagen de un mago con frac, pero poco a poco las chicas vamos ganando terreno". Lo suyo, sin embargo, es mucho más que una fachada. Licenciada en Psicología y con estudios de Arte Dramático, Inés -lo prefiere sin apellido- aprovecha todo lo que sabe sobre la mente humana.

Este fin de semana, la granadina presenta en su provincia el espectáculo Inés... plicable -hoy en el Liberia a las 21 horas y mañana en el Teatro de Armilla a las 20-, una combinación de elegancia, sencillez, humor y "muchísima interacción con el público". En el show, Inés hará desaparecer cosas, romperá cuerdas para volverlas a recomponer y utilizará las sombras chinescas para crear siluetas fantásticas. Uno de sus elementos preferidos son las monedas. "En esta época de crisis (se ríe), te reconozco que uno de los trucos que más me gustan es romper en muchos trozos un billete de quinientos para multiplicarlo". ¿Realidad o ficción? No importa demasiado porque reconoce que ella sí puede vivir de la magia.

Mucho de lo que ha aprendido se lo debe a su colaboración con Jorge Blass, Jandro y Luis Piedrahita en el programa de Cuatro Nada por aquí. El casting no fue nada difícil para ella. Unos trucos con cartas y monedas le bastaron para firmar por una temporada. "Era un programa que ofrecía una magia muy urbana e innovadora. Salíamos a la calle a hacer juegos con la gente y al final el programa duró tres años".

Ahora 'vuela' sola con una magia con mucho ritmo que sigue el camino emprendido en Cuatro. "Tenemos que adaptarnos a la sociedad y a las nuevas tecnologías. Aprovechar el avance y aplicarlo a la magia. Hay muchos juegos para hacer con iphone, por ejemplo, de predicciones, revelaciones... Juegos a través de internet, en los que aunque el espectador no esté presente puede formar parte del truco". Lo hace en la calle, en el teatro y en su propia casa porque ella, dice, es "maga las 24 horas al día. La magia siempre ha estado en mí". Nunca ha ejercido la profesión de psicóloga pero explica que en la magia un porcentaje muy alto es psicología, "sirve para saber cómo meterte al público en el bolsillo. Ha sido mi complemento perfecto". Mucho más que los tacones o cualquier traje porque Inés sigue la moda, como confiesa, y es "demasiado coqueta" para desvelar su edad, pero la elegancia, más que por fuera, la lleva por dentro.