El director neozelandés Peter Jackson no descarta dirigir él mismo El hobbit tras haber abandonado el proyecto el realizador mexicano Guillermo del Toro por los retrasos y problemas financieros de la productora. "Si eso es lo que tengo que hacer para proteger la inversión de Warner Brothers, obviamente ése es uno de los ángulos que miraré", afirmó en una entrevista publicada por el diario local Dominion Post.

No obstante, el responsable de la trilogía de El señor de los anillos recordó que ha firmado contratos como guionista y director para dos películas con estudios de Hollywood que posiblemente no den su visto bueno.

En cualquier caso, Jackson confió en que la salida de Del Toro no acabe con la película, de la que es productor ejecutivo junto a su esposa Fran Walsh. "No queremos dejar que esto afecte a nuestro progreso. La clave es que no queremos dar por cerrado el proyecto", que se podría empezar a filmar en noviembre si para entonces han hallado un nuevo director, añadió el cineasta.

Del Toro anunció ayer su marcha de El hobbit porque el rodaje se encuentra en punto muerto desde hace meses por los problemas financieros de la productora Metro Goldwyn Mayer (MGM), que comparte los derechos con Warner Brothers. MGM tiene una deuda de 3.700 millones de dólares y está sometida al control de una serie de fondos de capital riesgo que exigen reducir costes y se oponen a una ampliación de capital que podría acelerar el proyecto.

El hobbit tiene previsto su estreno para 2012, pero según Del Toro, necesita al menos 300 días de rodaje durante dos veranos australes en Nueva Zelanda, el país natal de Jackson y donde se rodó toda la saga de El señor de los anillos.