Un total de 10.000 personas han disfrutado de los distintos estilos musicales que se han oído en los cuatro días de concierto del XIX Parapandafolk de Íllora (Granada), que se clausuró ayer con el grupo cordobés Aliara y los sones cubanos de Ferrer Sons.

Los cordobeses llevaron al escenario sus canciones tradicionales andaluzas, mientras que los hijos del bolerista habanero Ibrahim Ferrer ofrecieron una noche de baile cubano.

El festival granadino se ha hermanado en esta edición con el de Pozoblanco (Córdoba), otra propuesta "de las únicas siete que existen en Andalucía y que hay que conservar", han destacado desde el grupo Aliara.

La organización del festival encara para el año que viene una edición especial conmemorativa del vigésimo aniversario, y así junto a un programa de conciertos reforzado se planea editar un DVD con su historia y un CD con la música que los grupos que han participado a lo largo de estas dos décadas han dejado en Íllora.