Desde Andalucía, el cuarteto Stolen Notes tiene el reto de adentrarse en la música tradicional irlandesa, y en la de otros países del Arco Atlántico tales como Escocia, Asturias o Bretaña, para "robar" de sus notas y alimentarse de su esencia y espíritu. Sus miembros, desde el más profundo respeto por la enorme tradición musical de estas tierras celtas, se embarcan en una aventura musical que se nutre de la fuente de la tradición para crear una propuesta fresca y con sello propio dentro del panorama Folk actual. Stolen Notes cierran hoy el Orcefolk 2010 junto con los vallisoletanos Triquel con una actuación en la Plaza de la Iglesia.

"Este encuentro es una gran iniciativa. Sinceramente creemos que todavía falta atención general a la música celta para que llegue a estar de moda de verdad. Y si algún día somos una plaga pues mejor, nos lo pasaremos en grande", aseguran los componentes de la banda, que opinan que sobre Andalucía y sobre Sevilla siguen existiendo demasiados tópicos: "La música folk en Sevilla lleva teniendo su sitio desde hace ya varias décadas, mucho antes del boom de la música celta más comercial. Ahora nosotros, de alguna manera, tomamos el relevo de varias generaciones de músicos de Sevilla que han investigado, creado y fomentado esta música".

Las claves de su música las sitúan en el poder de sus melodías para crear una serie de sensaciones y sentimientos abstractos tales que, cuando se escuchan, "la imaginación vuela". De todas formas, son conscientes de que lo suyo no tiene sólo un nombre: "Celtas celtas no somos porque nos gusta la carne hecha en barbacoa y no cruda yampoco vamos por la calle con un casco de metal, así que musicalmente intentamos seguir una línea muy definida y seleccionamos muy bien con los que nos arrejuntamos".

La banda confía en que su actuación de esta noche sirva para "evocar pasado y presente" a través de sus melodías y está convencida de que para tener éxito hay que prestar atención a dos aspectos: "Lo primero que hace falta es tener talento innato y lo segundo es ser muy listo y saber cómo trabajarlo, encauzarlo y explotarlo. Carlos Núñez como músico es un fuera de serie en ambos aspectos".